El pleno de la Knesset ha celebrado esta noche (lunes) un debate sobre las “40 firmas” a instancias de la oposición.
El líder de la oposición, Benjamin Netanyahu, criticó al primer ministro, Naftali Bennett, diciendo: “Bennett se jacta del crecimiento económico de Israel. Es uno de los mayores ladrones de crédito de los tiempos modernos”.
“Cualquiera que entienda de economía sabe que el crecimiento económico no es algo que se crea de la nada en cuatro meses. Es el resultado de una política ordenada que hemos seguido durante cuatro años, especialmente durante el período del coronavirus”, dijo Netanyahu.
Y añadió: “En mayo, incluso antes del cambio de gobierno, Israel se situó por primera vez en la historia entre las 20 primeras economías del mundo. Se trata de un gran logro gracias a nuestra política. Antes del cambio de gobierno, el Banco de Israel determinó que habíamos hecho crecer la economía un 15,4%. Puedes presumir todos los días de un crecimiento del 7% como si hubieras hecho algo. No haz hecho nada”.
“Usted dice que trajo un ‘presupuesto social’. No es social. Es un presupuesto que sube los impuestos y los precios, que golpea a la periferia y abusa de los sectores más débiles. Le sugiero a Bennett que se deje ya de piruetas. Ya sabes que no estarás aquí mucho tiempo. Así que aprovecha el tiempo para hacer algo real”, dijo Netanyahu.
“Cuando era primer ministro, dije a los estadounidenses: haré todo lo posible para evitar un acuerdo nuclear con Irán. Gracias a nuestros esfuerzos pudimos sacar a Estados Unidos del acuerdo nuclear y gracias a nuestras audaces operaciones, pudimos detener y disuadir a Irán de adquirir armas nucleares”, concluyó Netanyahu.
Abordó la cuestión iraní. “Irán reconoce su debilidad y se precipita. En un mes, Irán volverá a las conversaciones con las potencias para retomar el acuerdo nuclear, un peligro existencial para la seguridad de Israel. Le dará cientos de bombas nucleares apuntando a nuestras cabezas. ¿Y qué hace el gobierno? Bennett guarda silencio y se cuida de mantener su compromiso con la administración estadounidense de no actuar públicamente contra la vuelta de Irán al acuerdo”.