Después del mortal ataque con cohetes en Majdal Shams, el primer ministro Benjamin Netanyahu ordenó adelantar su regreso a Israel desde Washington. Un miembro de su séquito confirmó que el vuelo partirá a las 19:30 hora local, en lugar de las 23:00 horas originalmente programadas.
El presidente Isaac Herzog calificó el ataque de Hezbolá en Majdal Shams como “desgarrador” y declaró que “el mundo no puede permanecer en silencio ante los ataques terroristas de [Hassan] Nasrallah, incitados por Irán”. Herzog afirmó que “Israel defenderá a sus ciudadanos y su soberanía”, expresando sus condolencias a las familias de las víctimas y su deseo de recuperación para los heridos.
Hezbolá, armado y financiado por Irán, fue señalado por Herzog como responsable del ataque indiscriminado que cobró la vida de jóvenes inocentes. “Los terroristas de Hezbolá asesinaron brutalmente a niños que solo estaban jugando al fútbol. No volvieron a casa”, declaró.
El portavoz de las FDI, contralmirante Daniel Hagari, informó que el ataque con cohetes de Hezbolá en Majdal Shams se saldó con la muerte de 10 niños y jóvenes, todos entre 10 y 20 años. Hagari señaló que las sirenas de alerta sonaron brevemente antes del impacto del cohete en el campo de fútbol de la ciudad.
Hagari afirmó que Hezbolá ha negado su responsabilidad, pero la información de las FDI es clara: “Hezbolá es responsable del asesinato de niños inocentes”. El ataque, que evidencia la brutalidad de Hezbolá, será respondido con severidad, añadió.
Funcionarios israelíes anticipan una respuesta militar agresiva al ataque, con un alto funcionario israelí en Washington afirmando que “los acontecimientos en el norte provocarán un giro dramático en los combates en la zona”. Otra fuente de seguridad destacó que “este incidente no pasará desapercibido” y que habrá una represalia contundente.
Las FDI ya se están preparando para una dura respuesta, según informes de Walla News.