El primer ministro Benjamín Netanyahu está aplazando un discurso público previsto en el que se espera que anuncie la congelación de la reforma judicial del gobierno, tras el rechazo de los aliados de la Coalición.
A primera hora del lunes, el Canal 12 informó de que Netanyahu había decidido paralizar la reforma judicial, tras la destitución del ministro de Defensa Yoav Gallant (Likud) y las manifestaciones masivas que estallaron posteriormente en todo el país el domingo por la noche.
Ahora, sin embargo, el primer ministro retrasa su discurso, tras una reunión con los líderes de las facciones de la Coalición.
Según un informe de Kan, el ministro de Justicia, Yariv Levin (Likud), el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich (Partido Sionista Religioso) y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir (Otzma Yehudit), exigieron al Gobierno que siguiera adelante con la reforma judicial.
Al parecer, Ben-Gvir se enfrentó a Netanyahu, gritándole al primer ministro durante la reunión: “¿Qué es esto? No podemos rendirnos así”.
El Partido Sionista Religioso emitió una declaración el lunes por la mañana insistiendo en que la Coalición apruebe la legislación que modifica el comité de nombramientos judiciales antes de que finalice la actual sesión de la Knesset.
“Después de mucha consideración y consultas, nuestra posición es que no debemos hacer nada para detener la aprobación de la legislación”.
“Detener la legislación constituiría una rendición a la violencia, a la anarquía y al rechazo en el ejército y a la dictadura de la minoría, y socavaría los resultados de las elecciones”.
Mientras tanto, la Comisión de Constitución, Derecho y Justicia de la Knesset, encabezada por el presidente MK Simcha Rothman (Partido Sionista Religioso) aprobó el lunes el proyecto de ley de nombramientos judiciales para su segunda y tercera lecturas en el pleno de la Knesset.