Una encuesta reciente del diario Maariv otorga 11 escaños al partido Otzma Yehudit, liderado por el diputado Itamar Ben Gvir, en caso de celebrarse hoy elecciones en Israel.
El partido Likud obtendría 22 escaños, situándose a la cabeza. Le seguirían Yisrael Beytenu y los Demócratas, con 17 escaños cada uno.
Unidad Nacional se posicionaría como la tercera fuerza parlamentaria, al alcanzar 15 escaños. Más abajo, Yesh Atid y Otzma Yehudit compartirían la misma representación, con 11 escaños. Shas lograría 10.
Judaísmo Unido de la Torá conseguiría siete escaños. Hadash-Ta’al y Ra’am (Lista Árabe Unida) sumarían cinco escaños cada uno.
Balad y el sionismo religioso quedarían fuera del Parlamento, sin superar el umbral electoral.
Al dividir los resultados por bloques, los partidos de la coalición sumarían 50 escaños, mientras el centroizquierda alcanzaría 60. Los 10 escaños restantes pertenecerían a Hadash-Ta’al y Ra’am, que mantienen su independencia respecto a cualquier coalición.
Una variación en el escenario incluiría al ex primer ministro Naftali Bennett como candidato. En ese caso, su partido obtendría 29 escaños, desplazando al Likud al segundo lugar con 19. Los Demócratas alcanzarían 11.
Tanto Israel Beytenu como Otzma Yehudit sumarían 10 escaños. Shas se quedaría con nueve, y Yesh Atid lograría ocho. Unidad Nacional y Judaísmo Unido de la Torá obtendrían siete escaños cada uno. Hadash-Ta’al y Ra’am repetirían con cinco.
El sionismo religioso rozaría el umbral electoral, pero sin éxito para superarlo.
La distribución por bloques en este panorama dejaría 45 escaños para la coalición, 65 para el centroizquierda y los 10 restantes nuevamente en manos de Hadash-Ta’al y Ra’am.