El jefe militar Aviv Kohavi mantuvo ayer una reunión a puerta cerrada con varios generales sobre la posibilidad de que la reportera de Al Jazeera, Shireen Abu Akleh, fuera alcanzada por una bala israelí en Jenín el miércoles, según un informe de la televisión.
Dos fuentes familiarizadas con la discusión dicen que esta posibilidad se definió como “muy probable”, informa el Canal 12 de noticias.
La reunión se celebró antes de que las Fuerzas de Defensa de Israel publicaran un informe provisional de la investigación, en el que un incidente de fuego israelí figuraba como una de las dos hipótesis que podrían haber provocado la muerte de Abu Akleh, junto con la posibilidad de disparos palestinos.
Según la cadena, algunos de los participantes en la reunión consideraron no menos probable, y posiblemente más, que fuera alcanzada por una bala errante de las FDI que por el fuego indiscriminado palestino.
Al parecer, Kohavi dijo que se trataba de valoraciones prematuras y especulativas, y ordenó que se hicieran más aportaciones de expertos y una reconstrucción de los hechos, llevada a cabo por las tropas hoy mismo.
El jefe de las FDI también dijo que “ciertamente pensamos que es posible” que fuera alcanzada por el fuego de las FDI, pero que el examen de la bala extraída del cuello de Abu Akleh proporcionaría respuestas definitivas.
El portavoz de las FDI respondió a la cadena que no puede determinar definitivamente las circunstancias de la muerte de la reportera, y que los militares seguirán investigando y están comprometidos a encontrar la verdad.