El Coronel Richard Kemp, exlíder militar del Reino Unido en Afganistán, ha elogiado la reciente intervención de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en la ciudad de Jenín durante la Operación Hogar y Jardín.
La Operación Hogar y Jardín en Jenín
Kemp expresó que la realización de la intervención militar de alto riesgo en un entorno urbano sin causar daño a la población civil es un hecho extraordinario, quizás sin parangón en la historia militar reciente. Resaltó que en comparación, otras operaciones similares a menudo dan como resultado múltiples bajas civiles, incluso cuando son realizadas por ejércitos que se esfuerzan en prevenir tales resultados.
Aseguró que las FDI han demostrado una notable capacidad operativa en Jenín, una localidad conocida por ser refugio de grupos terroristas. Kemp subrayó la dificultad adicional que representa el hecho de que estos grupos usan a civiles como escudos humanos, una táctica destinada a provocar la reacción de las FDI y atraer la reprobación internacional.
Para el Coronel, las FDI han desafiado todas las expectativas, logrando no solo ejecutar la operación, sino también minimizar las bajas en una situación tan compleja y peligrosa.
Criticismo Internacional a la Operación Hogar y Jardín
La visión positiva de Kemp contrasta con las críticas que se han levantado en algunos círculos. Antonio Guterres, secretario general de la ONU, por ejemplo, calificó la intervención de Israel como una demostración de “fuerza excesiva”.
Kemp respondió a estas críticas, argumentando que el término “fuerza excesiva” no se aplica en este caso, ya que las acciones de las FDI no ocasionaron víctimas civiles. De igual forma, cuestionó la declaración de Guterres de que los ataques aéreos son inapropiados en operaciones de mantenimiento del orden, afirmando que el uso de drones era la estrategia más efectiva para manejar la amenaza y prevenir víctimas civiles en esta situación.
Rechazo a las Acusaciones de Violación del Derecho Internacional
Sven Kuehn von Burgsdorff, representante de la Unión Europea en los territorios asignados a la Autoridad Palestina, ha calificado la operación de las FDI como una “violación del derecho internacional”. Kemp contrarrestó este punto de vista, desafiando a Burgsdorff a especificar qué leyes internacionales habían sido violadas.
Enfatizó que las FDI no utilizaron armas ni tácticas prohibidas por el derecho internacional. También argumentó que cualquier país tiene derecho a proteger a sus ciudadanos de amenazas violentas, y que las acciones de las FDI en Jenín, lejos de ser desproporcionadas, eran claramente justificadas y necesarias.
Doble Estándar en las Críticas a Israel
Kemp también abordó la pregunta de por qué existen críticas hacia las acciones de las FDI a pesar de la notable ausencia de víctimas civiles. Aseguró que la crítica se debe menos a las acciones militares de Israel y más a su derecho a operar en Judea y Samaria.
Argumentó que el Estado de Israel tiene la obligación de proteger a sus ciudadanos y cumplir con la ley en esas zonas hasta que se resuelva la disputa territorial en curso. Afirmó que las acusaciones contra Israel reflejan una postura de doble estándar y sugirió que los líderes internacionales deben ser más cuidadosos con sus declaraciones, ya que pueden incitar a la violencia y apoyar las tácticas de los grupos terroristas.