Más de 1.000 personas resultaron heridas en el Líbano después de que dispositivos de comunicación utilizados por miembros de Hezbolá explotaran en diversas regiones del país, incluido el suburbio de Dahiyeh en Beirut, según informaron medios libaneses y la agencia de noticias Reuters.
Las explosiones ocurrieron supuestamente tras un hackeo de Israel a los buscapersonas portátiles empleados por el grupo, lo que provocó su detonación simultánea. Israel no ha hecho comentarios oficiales sobre el incidente.
Fuentes de seguridad citadas por Reuters indicaron que decenas de miembros de Hezbolá resultaron gravemente heridos, y un periodista de la agencia presenció a al menos diez combatientes sangrando por sus heridas. Los dispositivos afectados eran de última generación y habían sido adquiridos por el grupo en los últimos meses.
El Ministerio de Salud del Líbano emitió un comunicado, difundido por medios locales, en el que pidió a la población mantenerse alejada de dispositivos de comunicación inalámbrica. Además, solicitó donaciones de sangre y pidió a los hospitales de varias regiones que se mantuvieran en alerta máxima para atender al gran número de heridos.
Entre los heridos se encuentra el embajador de Irán en el Líbano, Mojtaba Amani, según informó el medio de noticias iraní Mehr.
Este incidente ha sido calificado por fuentes de Hezbolá como “la mayor violación de seguridad en casi un año de escaramuzas con Israel”. Aunque Israel no ha emitido declaraciones oficiales, un colaborador del primer ministro, Benjamin Netanyahu, insinuó que Jerusalén estaría detrás del ataque, pero la oficina del primer ministro se apresuró a distanciarse de esa afirmación.
Videos que circulan en las redes sociales pretenden mostrar el momento de las explosiones de los buscapersonas. Sin embargo, la autenticidad de estos materiales no ha sido verificada de forma independiente.
La situación continúa en desarrollo, y se espera que las autoridades libanesas y Hezbolá brinden más información en las próximas horas.