Las FDI permanecieron en alerta máxima a lo largo de la frontera norte con Líbano durante el fin de semana en medio de las expectativas de que Hezbolá siga tratando de atacar a los soldados israelíes desplegados en las cercanías.
El miércoles, helicópteros de ataque y aviones de combate israelíes atacaron los puestos pertenecientes a Hezbolá a lo largo de la frontera en respuesta al fuego de francotiradores contra las tropas de las FDI cerca del kibbutz Menara en la Alta Galilea.
Fue el tercer ataque fallido de Hezbolá desde que el líder del grupo, el jeque Hassan Nasrallah, prometió vengar la muerte de uno de sus operativos, asesinado en un supuesto ataque aéreo israelí en Siria en julio.
La alerta máxima continúa, ya que el Consejo de Seguridad de la ONU (UNSC) decidió el viernes extender el mandato de la fuerza de mantenimiento de la paz de la UNIFIL en el sur de Líbano por otro año, pero redujo ligeramente su número de tropas.
El Consejo añadió varias demandas del gobierno de Líbano para permitir a la UNIFIL operar más eficientemente después de los esfuerzos de Israel y los Estados Unidos para fortalecer la autoridad de la fuerza frente a la actividad de Hezbolá.
Estas nuevas demandas incluyen un mecanismo mejorado de presentación de informes a la ONU sobre incidentes violentos y violaciones; un llamado al Secretario General para que cree un plan de acción detallado para optimizar la eficacia de la fuerza; y una firme condena de los intentos de obstaculizar la libertad de movimiento de la fuerza y de las amenazas a las tropas de la FPNUL.
“Hoy ponemos fin a un largo período de complacencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas con respecto a la misión de mantenimiento de la paz de la FPNUL en Líbano y a la creciente y desestabilizadora influencia de Irán y de la organización terrorista Hezbolá”, mencionó el embajador de los Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Kelly Craft, en un comunicado. “La resolución de hoy es un paso hacia la mejora de la eficacia y el acceso de la misión”.
Añadió que reducir las tropas de mantenimiento de la paz de la ONU de 15 mil a 13 mil es un paso importante para dimensionar correctamente la misión. “La FPNUL también tendrá un rápido y completo acceso a los sitios necesarios para contener a Hezbolá y disminuir su vasto arsenal de armas”, continuó Craft.
“La Administración Trump examinará a la UNIFIL para asegurarse de que se hagan estas mejoras”, añadió. “Esperamos que las reformas pongan de relieve a los actores que obstruyen descaradamente la misión y ponen en peligro a las fuerzas de mantenimiento de la paz y a los pueblos de Líbano e Israel”.
El embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, señaló que la decisión del Consejo de Seguridad viene como una última advertencia para el Gobierno de Líbano.
“Si Hezbolá continúa convirtiendo el sur de Líbano en una base para su actividad terrorista bajo las narices de la FPNUL, el Gobierno de Líbano será responsable y asumirá la plena responsabilidad por cualquier escalada de las tensiones o las graves consecuencias de tales acciones”, manifestó Erdan.
“Israel no permitirá que los ataques terroristas emanen del territorio libanés y responderá con la fuerza a cualquier crimen de este tipo. El Gobierno de Líbano es responsable de lo que ocurra en su territorio. En los próximos meses, observaremos de cerca cómo se aplica el mandato renovado de la FPNUL y determinaremos si existe una justificación para la presencia de la fuerza”. Erdan continuó.
La FPNUL ha sido objeto de duras críticas en los últimos años tanto por parte de los Estados Unidos como de Israel. Los dos países han argumentado que el mandato de la UNIFIL no le da plenos poderes para operar como una fuerza de observación contra Hezbolá.
Están particularmente preocupados por el hecho de que el mandato no garantiza que la FPNUL pueda buscar los túneles del terror que Hezbolá ha construido a lo largo de la frontera para atacar a Israel.
Israel y los Estados Unidos desearían que el mandato se ampliara para incluir, entre otras cosas, la capacidad de la FPNUL de entrar en los hogares del sur de Líbano para buscar vías de entrada a los túneles.
Israel, en particular, ha sostenido que a menos que la FPNUL esté plenamente facultada, no tiene mucho sentido mantener su presencia en la frontera.
Si bien la FPNUL cuenta con un amplio apoyo entre los 15 Estados miembros del Consejo de Seguridad, existe una marcada división con respecto al mandato con arreglo al cual opera. Los Estados Unidos son uno de los cinco miembros permanentes del CSNU que tienen poder de veto.
Francia, supervisando el progreso de la resolución en las Naciones Unidas, circuló un borrador de compromiso final el jueves, que será sometido a votación el viernes por la tarde.
El límite de tropas se redujo de 15 mil a 13 mil para satisfacer una demanda clave de los Estados Unidos, aunque un diplomático llamó a ese cambio simbólico ya que solo 10 500 tropas están actualmente desplegadas.