La Fuerza Aérea israelí, bajo órdenes del gobierno, llevó a cabo un ataque sorpresa en la Franja de Gaza el martes por la noche, eliminando a altos mandos de Hamás y destruyendo decenas de objetivos estratégicos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ejecutaron la ofensiva en un lapso de 10 minutos, garantizando la confidencialidad operativa y tomando por sorpresa a Hamás. El bombardeo alcanzó aproximadamente 80 objetivos de forma simultánea. Entre los muertos se encuentran comandantes de compañía, subcomandantes, jefes de batallón, figuras del gobierno y líderes del enclave.
El plan militar se desarrolla conforme a la evaluación de la situación y a la evolución de los acontecimientos. Las FDI, junto con el Shin Bet, presentarán sus recomendaciones al gobierno, mientras se prevé la intensificación de la operación en los próximos días. La ofensiva no se limitará a ataques aéreos, sino que incluirá acciones terrestres.
Ante este escenario, las FDI han comenzado la evacuación de civiles en Beit Janún y en la zona de los hijos de Suheila, además de intensificar la persecución de miembros de Hamás.
El primer ministro Benjamín Netanyahu sostuvo una evaluación con el Jefe del Estado Mayor de las FDI, Eyal Zamir, quien posteriormente abordó la situación de los secuestrados junto al general de división (res.) Nitzan Alon, responsable del cuartel general de rehenes. Posteriormente, Zamir se reunió con el jefe del Consejo Regional de Eshkol, quien solicitó restaurar la normalidad en la zona.
Además, las FDI bombardearon posiciones de artillería del antiguo régimen sirio en Khan Arnabeh, al sur de Siria, tras considerar que representaban una amenaza para Israel. No se han revelado las recomendaciones del Jefe del Estado Mayor, del Jefe de Inteligencia Militar ni del Jefe de la Dirección de Operaciones respecto a la ofensiva en Gaza.