Aviones no tripulados de la Fuerza Aérea de Israel atacaron el lunes el puerto yemení de Hodeida, controlado por los hutíes, en respuesta a una serie de ataques con misiles y drones lanzados por ese grupo armado contra territorio israelí. El ejército informó que la operación tuvo como objetivo impedir que los hutíes restablecieran instalaciones previamente bombardeadas en represalia por ofensivas anteriores.
Las Fuerzas de Defensa de Israel indicaron que los bombardeos destruyeron infraestructura militar perteneciente a los hutíes en el sector occidental de Yemen. La operación se produjo luego de que el grupo intentó recuperar zonas ya atacadas. De acuerdo con la información oficial, esta fue la decimotercera acción israelí en Yemen, situado a unos 1.800 kilómetros.
A diferencia de incursiones previas, que implicaron el despliegue de múltiples aviones de combate, reabastecimiento aéreo y aeronaves de vigilancia, el ataque del lunes fue ejecutado únicamente con drones. Fuentes militares precisaron que no se emplearon otros medios aéreos durante la intervención.
Se trató del primer ataque israelí contra Yemen desde el 7 de julio. En el mismo periodo, los hutíes lanzaron seis misiles balísticos y al menos dos drones contra Israel, aunque sin provocar víctimas ni daños materiales. El ejército detalló que los objetivos alcanzados incluían equipos de ingeniería utilizados para reparar instalaciones portuarias, tanques de combustible y embarcaciones presuntamente empleadas en actividades militares.
El ministro de Defensa, Israel Katz, afirmó que las Fuerzas de Defensa de Israel han obstaculizado cualquier esfuerzo por restablecer la infraestructura vinculada a ataques anteriores. “El destino de Yemen será el mismo que el de Teherán”, declaró, aludiendo al enfrentamiento bélico entre Israel e Irán ocurrido el mes pasado.
Katz añadió que “los hutíes pagarán un alto precio por lanzar misiles contra el Estado de Israel” y aseguró que las operaciones militares continuarán en cualquier momento y lugar para defender el país. Las Fuerzas de Defensa de Israel sostienen que el puerto de Hodeida ha sido empleado por los hutíes para importar armamento iraní y realizar operaciones ofensivas contra Israel y embarcaciones en rutas comerciales internacionales.
Según un comunicado del ejército, se identificaron acciones continuas de restauración por parte de las fuerzas hutíes, por lo que se atacaron componentes implicados en esa actividad. La última agresión hutí registrada ocurrió el viernes por la noche, cuando un misil balístico fue interceptado en vuelo antes de alcanzar su objetivo.
Hasta el momento, no se ha emitido ningún comunicado oficial por parte del grupo hutí respecto a los ataques del lunes. El movimiento insurgente, conocido por su consigna “Muerte a Estados Unidos, muerte a Israel, \[y] una maldición sobre los judíos”, comenzó a atacar territorio israelí y embarcaciones comerciales en noviembre de 2023, tras la masacre perpetrada por Hamás el 7 de octubre.
El tráfico marítimo a través del mar Rojo, esencial para el transporte mundial de petróleo y materias primas, ha registrado una disminución notable como consecuencia de los ataques hutíes contra embarcaciones, las cuales afirman estar relacionadas con Israel. Aunque el grupo pactó con Estados Unidos en mayo una suspensión de hostilidades contra buques estadounidenses, aumentó sus ataques a inicios de julio, lo que provocó la destrucción de dos embarcaciones y la muerte de varios tripulantes.
Los hutíes mantuvieron sus ataques durante el alto el fuego acordado entre Israel y Hamás en enero de 2025. Para ese momento, ya habían lanzado más de 40 misiles balísticos, decenas de drones de ataque y misiles de crucero contra Israel. Uno de esos proyectiles mató a un civil e hirió a varias personas en Tel Aviv, lo que motivó el primer ataque israelí en Yemen.
Desde el 18 de marzo, fecha en la que Israel reanudó su ofensiva en Gaza, los hutíes han disparado 62 misiles balísticos y al menos 15 drones contra territorio israelí. Varios de estos misiles no alcanzaron sus objetivos y cayeron antes de cruzar las fronteras.