La Marina israelí llevó a cabo el domingo por la mañana una serie de ataques contra una central eléctrica situada al sur de la capital de Yemen, controlada por los hutíes, según informaron fuentes militares y un funcionario de defensa.
Las Fuerzas de Defensa de Israel, en un comunicado oficial, declararon que el ataque tuvo como objetivo “infraestructuras energéticas empleadas por el régimen terrorista hutí” en las cercanías de Saná. Esta acción se ejecutó en respuesta a los “reiterados ataques del régimen terrorista hutí contra el Estado de Israel y sus ciudadanos, que incluyen el lanzamiento de misiles tierra-tierra y vehículos aéreos no tripulados hacia territorio israelí”.
Medios locales reportaron explosiones de gran magnitud en la zona, las cuales dejaron fuera de servicio varios generadores eléctricos. El canal de televisión Al Masirah, controlado por los hutíes, atribuyó las explosiones a un acto de “agresión”, sin identificar la fuente. Según una fuente de defensa civil citada por Al Masirah, equipos de emergencia trabajaron para extinguir un incendio provocado por el incidente.
Un funcionario de defensa israelí confirmó que el ataque fue realizado por lanchas misilísticas de la Marina. Esta operación marcó la segunda ocasión en que la Marina israelí ataca territorio yemení, tras un ataque previo al puerto de Hodeida, controlado por los hutíes, en junio.
El ataque del domingo representó la decimocuarta acción militar de Israel contra los hutíes, respaldados por Irán, en Yemen, a unos 1.800 kilómetros de distancia. La mayoría de estos ataques han sido ejecutados por cazas de la Fuerza Aérea Israelí; el último, en julio, fue llevado a cabo por primera vez mediante un dron de la Fuerza Aérea.
Desde entonces, los hutíes han lanzado siete misiles balísticos y al menos siete drones contra Israel, sin que estos ataques hayan causado daños ni heridos. El último ataque hutí contra Israel ocurrió el jueves por la mañana, cuando un misil balístico fue interceptado.
Los hutíes, cuyo lema proclama “Muerte a América, muerte a Israel y maldición a los judíos”, iniciaron sus ataques contra Israel y el tráfico marítimo en noviembre de 2023, un mes después de la masacre perpetrada por Hamás el 7 de octubre. Durante el alto el fuego alcanzado entre Israel y Hamás en enero de 2025, los hutíes detuvieron sus acciones. Hasta ese momento, habían disparado más de 40 misiles balísticos y decenas de drones de ataque y misiles crucero contra Israel, uno de los cuales causó la muerte de un civil y heridas a varios en Tel Aviv en julio, lo que motivó el primer ataque israelí en Yemen.
Desde el 18 de marzo, cuando las Fuerzas de Defensa de Israel reanudaron su ofensiva contra Hamás en la Franja de Gaza, los hutíes han lanzado 69 misiles balísticos y al menos 22 drones contra Israel. Varios de estos misiles no alcanzaron sus objetivos.