Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron la finalización de una serie de bombardeos aéreos de gran escala en Irán, diseñados para neutralizar la capacidad de producción de armamento del país. Los ataques se concentraron en infraestructuras estratégicas, según el comunicado oficial del ejército israelí.
Los objetivos incluyeron instalaciones del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, la Fuerza Quds y las fuerzas armadas iraníes. “Múltiples centros de fabricación de armas distribuidos en Irán sufrieron impactos directos”, afirmó el ejército en su declaración.
Por su parte, los medios oficiales de Irán confirmaron la muerte de tres altos oficiales de inteligencia del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica en un ataque perpetrado en Teherán. Entre las víctimas se encuentran el general de brigada Mohammad Kazemi, jefe de inteligencia, su adjunto Hassan Mohaqiq y el oficial Mohsen Bagheri.
Las autoridades iraníes reconocieron los daños causados por los bombardeos, aunque no proporcionaron detalles adicionales sobre el alcance de las pérdidas en infraestructura militar.