El domingo, el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informó la muerte del mayor Jalaa Ibrahem, de 25 años y oriundo de la ciudad drusa de Sajur, durante un combate en el sur de la Franja de Gaza. El mayor Ibrahem era comandante de compañía en el 601.º Batallón de Ingeniería de la 401.ª Brigada.
Jalaa Ibrahem se convierte así en el undécimo miembro de la comunidad drusa que fallece en el conflicto.
Ese mismo día, la Fuerza Aérea Israelí (IAF), basándose en información de inteligencia proporcionada por las FDI y la Agencia de Seguridad de Israel (ISA), llevó a cabo un ataque en un complejo en la ciudad de Gaza. Este complejo albergaba a terroristas escondidos en un área adyacente a un edificio escolar.
Además, las FDI atacaron una instalación de fabricación de armas de Hamás, ubicada cerca de la escuela utilizada por la organización terrorista.
Antes del ataque, se implementaron diversas medidas para minimizar el riesgo de daños a civiles, como el uso de vigilancia aérea precisa y la recopilación de inteligencia adicional.
La organización terrorista Hamás viola continuamente el derecho internacional, utilizando estructuras civiles y a la población como escudos humanos en sus ataques contra Israel.