Los gobiernos de Turquía, Qatar y Arabia Saudita condenaron la decisión anunciada por Israel el domingo, que busca aumentar la población israelí en los Altos del Golán, territorio ocupado en 1967 y anexado sin reconocimiento internacional.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía expresó que esta decisión representa “una nueva etapa en el objetivo de Israel de expandir sus fronteras mediante la ocupación”. Ankara advirtió que esta medida podría socavar los esfuerzos para alcanzar paz y estabilidad en Siria e instó a la comunidad internacional a reaccionar contra estas acciones ilegales del gobierno de Netanyahu.
Qatar calificó el anuncio como “un nuevo episodio en la serie de agresiones israelíes en territorio sirio”, subrayando que constituye una violación flagrante del derecho internacional.
Arabia Saudita, por su parte, emitió un comunicado denunciando enérgicamente la decisión. Acusó a Israel de obstaculizar las perspectivas de Siria para recuperar la seguridad y estabilidad en la región.