Un bebé sirio de un año ha sido encontrado muerto en un bosque de Polonia, cerca de la frontera de este país de la UE con Bielorrusia.
El niño, que se cree que es la víctima más joven de la actual crisis en la frontera noreste de Europa, fue encontrado por el Equipo Médico de Emergencia Polaco, o PCPM, después de que se le llamara para asistir a otro migrante herido.
“Alrededor de las 2:26 am recibimos un informe de que al menos una persona necesitaba asistencia médica”, tuiteó la ONG. “Cuando llegamos al lugar, resultó que había tres personas heridas. Llevaban un mes y medio en el bosque”.
Además de un joven con fuertes dolores abdominales, la PCPM dijo que encontró a una joven pareja siria y a su bebé muerto.
“El hombre tenía una herida lacerante en el brazo, y la mujer tenía una herida de arma blanca en la parte inferior de la pierna”, añadió la PCPM. “Su hijo de un año murió en el bosque”.
La causa de la muerte del niño aún no se ha establecido, pero se sabe que hasta 13 personas han muerto en la zona recientemente, la mayoría debido a la exposición, ya que las duras condiciones se establecen con la llegada del invierno.
Maciej Szczesnowicz, líder de la comunidad musulmana tártara local, declaró a Reuters: “Es duro. Me duele que la gente se haya ido a otro país… y se haya encontrado con un destino así aquí en Polonia”.
Miles de personas, muchas de ellas procedentes de Oriente Medio, han quedado atrapadas en la frontera entre Polonia y Bielorrusia.
Se acusa al presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, de invitarles a cruzar a Europa del Este y al Báltico a través de su país, en represalia por las sanciones impuestas por la UE a Minsk tras una serie de supuestas violaciones de los derechos humanos después de las elecciones de este año.