El presidente Biden afirmó el viernes que Al Qaeda “había desaparecido” de Afganistán, pero en una entrevista en Fox News Sunday el secretario de Estado Antony Blinken admitió que esto no es cierto.
Durante unas declaraciones realizadas en la Casa Blanca, el presidente había cuestionado qué interés tenía Estados Unidos en permanecer en Afganistán “con Al Qaeda desaparecida”, a pesar de que un informe de Naciones Unidas afirmaba que la organización terrorista estaba presente en 15 provincias afganas, y de que el general Mark Milley había dicho que, si los talibanes se hacían con el poder, tendría que aumentar el nivel de la amenaza terrorista de Al Qaeda. Blinken ofreció una aclaración sobre la declaración de Biden, aunque reconoció que, a primera vista, no era cierta.
“Como todos sabemos, fuimos a Afganistán hace 20 años con una misión y un propósito en mente: y eso era ocuparse de la gente que nos atacó el 11-S, llevar a Bin Laden ante la justicia, lo que hicimos hace una década, y disminuir la capacidad de Al Qaeda para hacer lo mismo de nuevo, para atacarnos desde Afganistán y eso, en opinión del presidente, ha tenido éxito”, dijo Blinken.
El presentador Chris Wallace insistió en la cuestión, preguntándole de nuevo si Al Qaeda había desaparecido de Afganistán. Blinken respondió diciendo que la capacidad de Al Qaeda para llevar a cabo otro atentado al estilo del 11-S estaba “muy, muy disminuida”.
Cuando se le preguntó por tercera vez si Al Qaeda había “desaparecido”, Blinken admitió que no era así.
“¿Hay miembros y restos de Al Qaeda en Afganistán? Sí”, dijo. “Pero a lo que el presidente se refería era a su capacidad de hacer lo que hizo el 11-S y esa capacidad ha disminuido con mucho éxito”.
Wallace también cuestionó la declaración de Biden del viernes de que “no ha escuchado ninguna pregunta sobre nuestra credibilidad por parte de nuestros aliados en todo el mundo”. Mientras tanto, Armin Laschett, posible sucesor de la canciller alemana Angela Merkel, dijo que lo que está ocurriendo es “la mayor debacle que ha visto la OTAN desde su fundación”, y el diputado británico Tom Tugendhat, presidente de la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, calificó a Biden de “vergonzoso” por acusar a las fuerzas afganas de no querer luchar por su país.
“Todo lo que puedo decir es lo que he oído”, dijo Blinken, afirmando que ha escuchado “de forma generalizada, un profundo aprecio y agradecimiento de los aliados y socios por todo lo que hemos hecho para sacar a nuestros aliados y socios del peligro”.
Blinken también se enfrentó a las críticas por su propia actuación. En concreto, Wallace mencionó un memorándum enviado a Blinken el 13 de julio por 23 empleados de la embajada de Estados Unidos en Afganistán en el que se afirmaba que la toma del poder por parte de los talibanes estaba siendo más rápida de lo esperado y se pedía que se acelerara la evacuación de los aliados afganos. Cuando se le preguntó por qué no se movía más rápido, Blinken señaló a la administración Trump.
“Cuando se trata del programa de visados especiales para inmigrantes… heredamos un programa que estaba en un punto muerto”, dijo Blinken. “No se habían hecho entrevistas cuando llegamos al cargo para los visados de estas personas que se remontaban a marzo de 2020”.
Blinken sí reconoció que la falta de entrevistas se debió “en gran medida” a la pandemia de coronavirus.
El secretario admitió entonces que, a pesar del memorándum, la administración no creía que la toma de posesión fuera tan rápida, “creíamos que podíamos hacer esto de una forma muy acelerada, con más recursos, con más gente fuera, pero que tendríamos tiempo para hacerlo de forma efectiva”.