El Consejo de Relaciones con la Comunidad Judía de Colorado dice que está “indignado y desconsolado” por el ataque con bombas incendiarias contra una manifestación de rehenes que hirió a seis personas el día de hoy.
Los detalles sobre el ataque aún no están claros a la espera de una investigación, pero el grupo dice: “Sabemos que personas inocentes resultaron gravemente heridas por nada más que crear conciencia sobre los rehenes retenidos por Hamás durante más de 600 días”.
La declaración destaca el ataque a tiros de hace 10 días que mató a dos empleados de la embajada israelí y el intento de ataque con bombas incendiarias del mes pasado contra la embajada de Estados Unidos en Tel Aviv por parte de un hombre de Colorado.
“Debemos mirarnos en el espejo y preguntarnos cómo nuestra sociedad permitió que esto sucediera y siguiera sucediendo”, dice Brandon Rattiner, jefe del JCRC en Colorado.
“Nuestra comunidad ha advertido constantemente que la retórica odiosa y reduccionista sobre Israel y los judíos nos pone en peligro. No estamos siendo alarmistas, solo estamos prestando atención”, dice. “La violencia contra los judíos es inmoral y debe terminar”.
“Seguiremos viviendo con orgullo y abiertamente”, dice Rattiner. “Cualquiera que afirme preocuparse por la vida y la dignidad humanas debe hablar en contra de este ataque y contra el antisemitismo”.