El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, elogió el lunes a tres países sudamericanos por haber declarado al Hezbolá del Líbano como grupo terrorista, mientras que criticó a Venezuela por seguir apoyando a la organización.
“Aplaudimos los anuncios de Colombia, Honduras y Guatemala para designar a Hezbolá, apoyada por Irán, como una organización terrorista”, escribió Pompeo. “Esta y otros grupos terroristas transnacionales siguen activos en la región. Estados Unidos continúa reuniendo apoyo internacional para contrarrestar estas amenazas”.
Al asistir a una conferencia internacional para discutir la cooperación regional contra el terrorismo, celebrada en Colombia, Pompeo criticó al presidente venezolano Nicolás Maduro por abrazar al grupo terrorista chiíta.
Hezbolá “ha encontrado un hogar en Venezuela bajo Maduro. Esto es inaceptable”, dijo Pompeo cuando se reunió con el líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, para conversar sobre estrategia. Guaidó es reconocido por los Estados Unidos y por casi 60 naciones más como el líder legítimo de Venezuela.
A principios del lunes, Colombia y Honduras declararon oficialmente al Hezbolá del Líbano como una organización terrorista.
“Declaramos a Hezbolá como organización terrorista y la incluiremos en el registro de personas e instituciones vinculadas a los actos de terrorismo y su financiamiento”, dijo el Viceministro de Seguridad de Honduras, Luis Suazo, según la agencia de noticias Reuters.
El domingo, el presidente hondureño Juan Orlando Hernández dijo que su gobierno pondría al grupo terrorista en una lista negra, a través de una serie de declaraciones políticas.
También compartió un video en Twitter en el que habla ante el Consejo Israelí-Americano el mes pasado sobre los bombardeos de edificios judíos e israelíes en Argentina en 1992 y 1994, que se cree fueron llevados a cabo por Hezbolá e Irán.
El presidente Hernández señaló que el presidente de Guatemala había acordado designar a Hezbolá como un grupo terrorista también.
El año pasado, Argentina y Paraguay pusieron a Hezbolá en una lista negra, lo que llevó a Hernández a anunciar en noviembre que su país haría lo mismo.
Hezbolá está en la lista de organizaciones terroristas de Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y la Liga Árabe. La Unión Europea considera actualmente solo el ala militar del grupo como tal.
Hezbolá se formó en 1982 bajo la dirección del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán con la intención de destruir Israel. Desde entonces ha servido como el brazo de la República Islámica a las puertas de Israel.
Ha pasado de ser un pequeño grupo armado ubicado principalmente en el sur del Líbano a una fuerza formidable con una gran presencia e influencia en la política libanesa.
El grupo posee decenas de miles de combatientes entrenados, así como una amplia gama de armamento sofisticado. Su intervención en Siria del lado del presidente Bashar Assad también amplió su influencia y alcance en la región.
Se le ha culpado de múltiples ataques y complots terroristas contra israelíes en todo el mundo.
Bajo la Resolución 1701 de la ONU, que puso fin a la Segunda Guerra del Líbano de 2006 entre Israel y Hezbolá, el Líbano se comprometió a desarmar al grupo terrorista respaldado por Irán, pero no lo ha hecho.