Funcionarios estadounidenses respondieron hoy jueves por primera vez a la violenta interrupción de un servicio de oración de Yom Kipur en la plaza Dizengoff de Tel Aviv el lunes.
Funcionarios del Departamento de Estado dijeron al sitio de noticias israelí Ynet que Estados Unidos apoya el derecho de los fieles a rezar con separación entre hombres y mujeres en un espacio público, así como el derecho de los manifestantes a reunirse para protestas no violentas, siempre que ambos no violen la legislación local.
“Estados Unidos apoya el derecho a la libertad de reunión”, afirma un comunicado oficial. “Las manifestaciones no violentas son una parte central de cualquier sociedad democrática y pedimos a todas las partes que mantengan el orden y eviten la violencia”.
La declaración añadía que la administración está preocupada por la violencia y las acciones y declaraciones de funcionarios israelíes que, en opinión del gobierno estadounidense, inflaman aún más las tensiones.
La declaración se produce un día después de que la Administración Biden anunciara la incorporación de Israel al Programa de Exención de Visados de Estados Unidos.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, presentaron el certificado de aprobación.
Se estima que la puesta en marcha del proceso durará unas semanas, y que durante el mes de noviembre los israelíes ya podrán entrar en EE.UU. sin necesidad de presentar visado, como se les exigía hasta ahora.
El registro en el sistema ESTA del Control de Fronteras estadounidense, que proporciona la exención de visado, incluye un cuestionario (en inglés) en el que se hacen varias preguntas al viajero. La exención recibida es válida durante un periodo de dos años.
Manifestantes de izquierda interrumpieron violentamente los rezos de Yom Kipur después de que los organizadores del servicio de oración intentaran eludir la prohibición del ayuntamiento de Tel Aviv de erigir una mehitza, una separación entre hombres y mujeres, en el lugar. En años anteriores se habían aprobado servicios de oración con mehitzá en la plaza Dizengoff. Este año, el ayuntamiento impuso una nueva condición que prohibía de hecho las oraciones ortodoxas en el lugar.
No es habitual que el gobierno estadounidense comente un asunto interno de otro país, como los enfrentamientos en el servicio de oración.