LA HAYA, Países Bajos – Holanda acusó el martes a Irán de participar en el asesinato de dos disidentes en territorio holandés, y agregó que la Unión Europea estaba golpeando a Teherán con sanciones, en parte como resultado de los asesinatos.
El servicio secreto holandés «tiene fuertes indicios de que Irán estuvo involucrado en los asesinatos de dos ciudadanos holandeses de origen iraní en Almere en 2015 y en La Haya en 2017», dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Stef Blok, en una carta al parlamento.
«Estos individuos eran opositores al régimen iraní«, dijo en la carta, también firmada por la ministra del Interior holandesa, Kajsa Ollongren.
«Los Países Bajos consideran probable que Irán haya participado en la preparación o comisión de asesinatos y ataques en el territorio de la Unión Europea«, dijeron los ministros.
Agregaron que la Unión Europea acordó el martes «en parte por recomendación de los Países Bajos» acordar imponer nuevas sanciones a Irán.
La policía holandesa ha nombrado previamente a las dos víctimas como Ali Motamed, de 56 años, quien fue asesinado en la ciudad central de Almere en 2015, y Ahmad Molla Nissi, de 52 años, asesinado en La Haya en 2017.
Dutch-Ahwazi activist Ahmad Mola Nissi shot to death in Hague on Nov 8. (#IRGC’s Quds allegedly involved in the terror attack) @VP @POTUS pic.twitter.com/GcBsAVySfT
— Kaveh Taheri 🕊 (@MrJournaliste) November 9, 2017
En junio pasado, los Países Bajos expulsaron a dos trabajadores de la embajada iraní en relación con los asesinatos.
Teherán en ese momento protestó por la expulsión de los dos diplomáticos como una «medida hostil y destructiva» y amenazó con tomar represalias.
El primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen, había confirmado anteriormente que la Unión Europea había acordado nuevas sanciones contra el Ministerio de Inteligencia y Seguridad iraní y dos ciudadanos iraníes.
Dinamarca había liderado los esfuerzos para imponer sanciones luego de las denuncias de que Teherán había intentado matar a tres disidentes iraníes en territorio danés.
Mientras tanto, Francia había golpeado a dos agentes iraníes sospechosos con la congelación de activos debido a un plan para bombardear un mitin cerca de París.