Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se declaró culpable este jueves de los nueve cargos presentados en su contra en el caso federal por evasión fiscal. El juez que lleva el caso aceptó la declaración de culpabilidad, según informó CNN.
La audiencia de sentencia se ha programado para el 16 de diciembre, tras las elecciones presidenciales de noviembre. La fiscalía no se opuso a la fecha, que fue sugerida por el propio juez.
Inicialmente, Hunter Biden buscaba resolver su situación con una “declaración Alford” en California, lo que le habría permitido mantener su inocencia mientras aceptaba el castigo. Sin embargo, en un giro inesperado, su equipo legal decidió cambiar de estrategia este jueves por la tarde, anunciando que presentaría una “declaración abierta”, admitiendo que su comportamiento cumplía con los elementos de los delitos fiscales que se le imputaban.
Biden testificó bajo juramento en un tribunal federal de Los Ángeles, asegurando que nadie le había hecho promesas ni lo había forzado a declararse culpable. Afirmó que la decisión fue completamente suya, según declaró a CNN.
El caso estaba por resolverse justo antes del inicio del juicio en Los Ángeles. De haberse llevado a cabo, habría sido el segundo juicio penal de Biden en este año, luego de ser condenado en junio por tres cargos federales relacionados con armas en Delaware.
Los fiscales lo acusan de nueve delitos fiscales, incluyendo tres de carácter grave, alegando que no pagó 1,4 millones de dólares en impuestos federales y que evadió impuestos a través de deducciones comerciales fraudulentas.
Posteriormente, Biden pagó aproximadamente 2 millones de dólares en impuestos atrasados y multas, tras enfrentarse durante años a una lucha contra la adicción a las drogas y el alcohol. Sin embargo, el juez impidió que sus abogados mencionaran estos pagos o su historial de adicciones durante el juicio, lo que fue un golpe para su defensa.
La complejidad de su proceso de culpabilidad recordó un caso similar en Delaware el verano pasado, donde un intento de acuerdo fracasó por desacuerdos entre las partes y preocupaciones del juez sobre asuntos constitucionales.
El presidente Joe Biden ha reiterado en varias ocasiones que no tiene la intención de indultar a su hijo. Aunque no se sabe si esta postura cambiará tras haber suspendido temporalmente su campaña de reelección, el presidente sigue teniendo la autoridad para otorgar un indulto o conmutar la sentencia.