Varios sospechosos involucrados en ataques con cohetes lanzados hacia Israel en marzo fueron capturados por el ejército libanés, según un comunicado difundido el miércoles. Entre los detenidos se encuentran varios palestinos señalados por su participación en dos ofensivas que provocaron represalias aéreas israelíes en Beirut y el sur del país.
Hezbolá, organización terrorista apoyada por Irán, negó en su momento haber sido responsable de los ataques con cohetes. Tras el cese al fuego acordado en noviembre entre Israel y Hezbolá, Israel retiró la mayoría de sus tropas del Líbano, manteniendo solo cinco puestos estratégicos. Sin embargo, ha continuado bombardeando objetivos de Hezbolá al considerar que representan una amenaza inmediata.
Durante las detenciones, las fuerzas libanesas decomisaron un vehículo y otros elementos utilizados en los lanzamientos. Los arrestados fueron puestos a disposición de la justicia tras múltiples redadas ejecutadas en distintas regiones del país, aunque las autoridades no ofrecieron más información sobre estas operaciones.
El general Rodolph Haikal informó sobre la situación de seguridad fronteriza en una reunión de gabinete celebrada el jueves, según reportó la Agencia Nacional de Noticias. Cuatro palestinos ligados al grupo terrorista Hamás están siendo interrogados, afirmaron tres funcionarios de seguridad y un funcionario judicial a The Associated Press.
Hamás aseguró a la AP que algunos de sus miembros fueron arrestados en Líbano recientemente pero liberados poco después, insistiendo en que no participaron en el ataque contra Israel. En uno de los casos, las autoridades libanesas detuvieron a un miembro del grupo por portar un arma sin licencia.
Hezbolá disparó cohetes y drones contra Israel el 8 de octubre de 2023, un día después de que Hamás iniciara su ofensiva desde Gaza. Los enfrentamientos diarios duraron casi un año, desplazaron a cerca de 60.000 israelíes y causaron decenas de muertes civiles en Israel, hasta que el alto el fuego de noviembre redujo significativamente las hostilidades.
La oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos informó el martes que 71 civiles, entre ellos 14 mujeres y nueve niños, han muerto en ataques israelíes desde la tregua. Israel defiende que sus ofensivas en territorio libanés apuntan a operativos terroristas que infringen el acuerdo y buscan frenar la reactivación de la infraestructura de Hezbolá. Según datos israelíes, más de 120 miembros de ese grupo han muerto desde entonces.
En una rueda de prensa posterior a la reunión de gabinete, el ministro libanés de Información, Paul Morcos, denunció 2.740 violaciones del alto el fuego por parte de Israel. Indicó que 190 personas han muerto y 485 han resultado heridas en Líbano debido a esos ataques, sin especificar cuántas víctimas eran civiles.