El gobierno polaco ha preparado un decreto de defensa actualizado, que prevé un fuerte aumento del número de las fuerzas armadas del país.
Según el Poland Daily Live, el documento sustituirá a la doctrina militar adoptada en 1967, cuando Polonia formaba parte del bloque soviético.
Según el proyecto de ley, el número de efectivos del ejército polaco deberá duplicarse en los próximos años, pasando de 150 a 300 mil personas, lo que lo convertirá en el mayor de Europa. También se crearán unidades de ciberdefensa en las Fuerzas Armadas polacas.
El viceprimer ministro de Polonia, presidente del partido conservador Ley y Justicia, Jaroslaw Kaczynski, al presentar el proyecto junto con el ministro de Defensa Nacional, Mariusz Blaszczak, dijo que Polonia está situada en el borde exterior de la OTAN y de la Unión Europea y, por lo tanto, “debería tener una capacidad de disuasión importante”.
“Y si fuera necesario, debería estar preparada para defenderse eficazmente de un ataque”, dijo Kaczynski, añadiendo que esperaba que “esto nunca ocurriera”.
Según Kaczynski, el proyecto de ley pretende reforzar “radicalmente” el ejército polaco ante las “ambiciones imperiales” de Rusia y la “guerra híbrida” emprendida por el autoproclamado presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, que envía a miles de inmigrantes de África y Oriente Medio a la frontera polaca.
La UE acusa a Lukashenko de facilitar la migración ilegal en respuesta a las sanciones impuestas tras las elecciones presidenciales del año pasado, que fueron acompañadas de un fraude masivo y la posterior represión brutal de las protestas.
A finales de octubre, el Parlamento polaco aprobó la construcción de una valla fortificada de 100 kilómetros en la frontera con Bielorrusia.
En las últimas semanas, Varsovia ha desplegado miles de soldados en la frontera, ha levantado una valla de alambre de espino y ha declarado el estado de emergencia en la zona fronteriza.
El lunes 8 de noviembre, el gobierno polaco convocó una reunión de emergencia debido a la situación en la frontera con Bielorrusia. El ministro que coordina el trabajo de los servicios especiales polacos, Stanislav Zharyn, calificó las multitudes de migrantes reunidas en la frontera como un intento de invadir Polonia por la fuerza.
El viceministro polaco de Asuntos Exteriores, Piotr Wawrzyk, se mostró convencido de que Lukashenko busca una escalada que provocará “víctimas mortales en ambas partes”.