Ningún representante de Rusia fue invitado a los actos conmemorativos en Polonia en el 80º aniversario del inicio de la Segunda Guerra Mundial debido al desinterés de Rusia por mantener el “espíritu de la verdad histórica”, dijo el viceministro de Asuntos Exteriores polaco Szymon Szynkowski vel Sęk a la emisora de radio Maryja en una entrevista.
Señaló que Polonia había invitado a representantes de la Unión Europea, la OTAN y la Asociación Oriental, que incluye a Armenia, Azerbaiyán, Belarús, Georgia, Moldova y Ucrania. Rusia, sin embargo, no es miembro de ninguna de estas asociaciones.
El diplomático señaló que el presidente ruso Vladimir Putin fue invitado al acto conmemorativo hace diez años, y que el presidente estadounidense Donald Trump fue invitado este año. El viceministro dijo que tal decisión constituía un “cambio en el enfoque de los asuntos históricos”.
Describió la visita del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky a Varsovia el sábado como “una verdad histórica”.
“Cuanto más verdad e integridad histórica haya en las declaraciones de los presidentes, mejor”, concluyó el viceministro de Asuntos Exteriores polaco.
Durante la ceremonia de conmemoración el presidente de Alemania Frank-Walter Steinmeier pidió el domingo perdón a Polonia por el conflicto más sangriento de la historia.
“Inclino la cabeza ante las víctimas del ataque a Wielun. Inclino la cabeza ante las víctimas polacas de la tiranía alemana. Y pido perdón”, dijo Steinmeier en alemán y polaco.
Polonia sufrió algunos de los peores horrores de la Segunda Guerra Mundial: casi seis millones de polacos murieron en el conflicto que mató a más de 50 millones de personas en total.
Esa cifra incluye a los seis millones de judíos que murieron en el Holocausto, la mitad de ellos polacos.