El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, en una visita a los Emiratos Arabes Unidos, dijo el martes que Estados Unidos quiere mostrarle a Irán que sus acciones tienen “un costo real alto”.
En declaraciones a Sky News Arabia, dijo que se sigue enfocando en negar a “Irán la capacidad financiera para continuar con este mal comportamiento”.
Pompeo dijo que incluía una “serie de sanciones dirigidas no al pueblo iraní, sino con la única misión de convencer al régimen iraní de que su comportamiento maligno es inaceptable”.
Pompeo se encontró con el poderoso príncipe heredero de Abu Dhabi, Mohammed bin Zayed Al Nahyan, durante su breve viaje a los EAU.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció a principios de mayo la retirada unilateral de los Estados Unidos del acuerdo nuclear de Irán y el restablecimiento de las sanciones contra el país, así como contra las empresas extranjeras que hacen negocios con él.
El viernes, los socios restantes en el acuerdo nuclear de 2015 prometieron mantener a Irán conectado a la economía global a pesar de la retirada de Estados Unidos y la amenaza de sanciones.

Gran Bretaña, Francia y Alemania junto con Rusia y China se reunieron con Irán en Viena para ofrecer beneficios económicos y garantías que reducirían el golpe de las amplias sanciones de Estados Unidos anunciadas por Trump.
Los ministros de Asuntos Exteriores acordaron el viernes una lista de 11 puntos de objetivos conjuntos en la capital austriaca, donde el acuerdo fue firmado con el objetivo de evitar que Irán construya la bomba atómica a cambio del alivio en las sanciones.
En la declaración conjunta, reconfirmaron su compromiso con el acuerdo y sus “dividendos económicos” para Irán, que ha sufrido una turbulencia financiera cada vez mayor desde que Trump abandonó el acuerdo, y se comprometieron a trabajar para “proteger a las empresas de los efectos extraterritoriales de las sanciones estadounidenses”.
Aunque no hubo promesas concretas ni fechas límites, también prometieron esfuerzos para mantener abiertos los canales financieros con Irán, promover la cobertura del crédito a la exportación y mantener los enlaces de transporte aéreo, marítimo y terrestre al aire libre.