El presidente ruso, Vladimir Putin, no felicitó al presidente estadounidense, Joe Biden, por el Día de la Independencia de Estados Unidos, dijo el portavoz de Putin, Dmitri Peskov, durante una rueda de prensa.
“No, este año no hubo ninguna carta de felicitación. Esto se debe a que este año ha sido la culminación de una política poco amistosa hacia nuestro país por parte de Estados Unidos. Por lo tanto, en estas condiciones, no se puede considerar oportuno enviar un mensaje de felicitación de este tipo”, dijo el secretario de prensa de Putin.
Peskov también abordó el tema de la guerra ruso-ucraniana, señalando que todo va según lo previsto en el inicio de la invasión a gran escala del país vecino.
“Está progresando de acuerdo con los planes y ajustes existentes”, aseguró el portavoz del Kremlin, sin especificar qué tipo de “ajustes” se han hecho al plan original.
“En cuanto a las cuestiones de los pasos tácticos posteriores, esto es competencia del Ministerio de Defensa. Sólo puedo decir: la operación se desarrolla según el plan”, añadió Peskov, que se negó a decir a los periodistas si las tropas rusas intensificarán sus acciones en las direcciones de Donetsk y Kharkiv.
Asimismo, el representante del Kremlin expresó su esperanza de que se resuelva la cuestión de las restricciones al tránsito de mercancías hacia Kaliningrado, aunque dijo que paralelamente el Kremlin está trabajando en “escenarios alternativos si el bloqueo continúa”.
A diferencia de Putin, el dictador bielorruso, Alexander Lukashenko, no tuvo tantos principios y felicitó al pueblo de Estados Unidos de América por el Día de la Independencia en nombre de los bielorrusos y en el suyo propio.
“En este día festivo, deseo a todos los estadounidenses cosas sencillas que son comprensibles para todos y que unen a todas las personas, independientemente del nivel de bienestar y del color de la piel: buena salud, paz, estabilidad y fe en un futuro mejor, que sólo es posible si nos esforzamos juntos por conseguirlo”, dijo el dictador de Bielorrusia.
Lukashenko propuso “olvidar los desacuerdos que dividen a familias, sociedades, continentes enteros, y unir esfuerzos para encontrar una salida a la alarmante e insegura situación actual”.
Anteriormente, Lukashenko dijo que determinó el papel de Bielorrusia en la guerra ruso-ucraniana “hace mucho tiempo” y destacó que la Federación Rusa y Bielorrusia han creado una “agrupación única de fuerzas armadas” hace tiempo.