“Los Estados Unidos están tratando de desestabilizar la situación en Rusia difundiendo información errónea sobre la situación de la pandemia COVID-19 en Rusia y la caída del apoyo público a Putin”, dijo el presidente de la Duma Estatal Rusa, Vyacheslav Volodin.
“El propósito de todos estos ataques planeados es obvio: destruir Rusia. Debemos prevenir esto”, dijo.
Volodin subrayó que el propósito de los ataques de Estados Unidos es desacreditar al presidente ruso, a las principales instituciones de poder y a los principales políticos para socavar su autoridad y debilitarlos.
Dijo que Washington está tomando medidas extremas sobre Rusia y China, lo que no había sucedido antes, ya que estos países están “superando” a Estados Unidos. Pero hay que admitir que Estados Unidos sigue siendo un importante centro financiero, dijo.
Según Volodin, Washington está violando sus compromisos en el comercio internacional, cancelando los acuerdos de seguridad mundial y poniendo a los socios europeos en desventaja al “pensar solo en sí mismo”.
A mediados de mayo, Bloomberg publicó un artículo en el que comparaba la tasa de mortalidad por coronavirus en Rusia con la de otros países. El artículo dice que Rusia es el único país entre los diez países con el nivel más alto de COVID-19, donde la tasa de mortalidad es inferior al 1%.
Inicialmente el artículo fue llamado: “Los expertos quieren saber por qué el coronavirus no ha matado a más rusos”, y luego, tras las críticas de las autoridades rusas, fue sustituido. Según la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, la agencia se dio cuenta de que “el titular da miedo”.
Posteriormente, Bloomberg publicó un artículo en el que, citando datos del Centro de Investigación de la Opinión Pública Rusa VTsIOM dijo que la calificación del presidente ruso Vladimir Putin cayó al 27 por ciento debido a la creciente crisis causada por la pandemia del coronavirus. La embajada rusa en los Estados Unidos exigió una disculpa del personal editorial de la agencia por el material y calificó los datos presentados como “falsos”.