Los militares rusos han montado un campamento y han desplegado sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple en Bielorrusia, a 200 kilómetros de Kiev, informó el grupo de investigación Conflict Intelligence Team (CIT).
Según CIT, se observó la descarga de sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple Uragan por parte de militares rusos en la estación de Rechytsa, en la región bielorrusa de Gomel, al norte de Kiev. Posteriormente, se publicó una foto del campamento con equipos militares, que supuestamente fue tomada cerca de Rechytsa. Muestra un transporte y un cargador para MLRS Uragan.
Los analistas del CIT también realizaron un análisis de geolocalización de un vídeo similar tomado cerca de la estación de Ivanovka en el que se ve equipo militar.
“Hemos verificado y confirmado esta geolocalización. Desde allí hay algo más de 40 kilómetros hasta la frontera con la región ucraniana de Chernihiv y unos 90 kilómetros hasta la región de Kiev. Cabe destacar que en esta zona no hay campos de entrenamiento declarados para los ejercicios ruso-bielorrusos ‘Aliados Resueltos’, que se celebrarán en febrero”, señalan los analistas del CIT.
Según ellos, las armas rusas en las inmediaciones de la frontera con la región de Kiev suscitan preocupación en relación con las recientes informaciones de la CNN de que las tropas rusas podrían intentar capturar Kiev y llevar a cabo un cambio de poder en Ucrania.
“El hecho es que todos los principales edificios gubernamentales de Kiev están situados en la orilla occidental del Dniéper, y una posible ofensiva desde el norte permite evitar una barrera de agua tan importante (en contraste con la ofensiva desde la frontera ruso-ucraniana). Al mismo tiempo, seguimos sin conocer el número de fuerzas al norte de Kiev. Por el momento, nos parece probable que el objetivo de este campo sea obligar al mando ucraniano a mantener parte de las fuerzas en la orilla occidental del Dniéper para proteger Kiev, lo que limitará la capacidad de contrarrestar una posible operación rusa en el este de Ucrania”, concluyen los investigadores del CIT.