Tras la decisión de Lituania de restringir el tránsito de mercancías hacia y desde Kaliningrado, Rusia inició ejercicios militares en la región.
El Ministerio de Defensa ruso anunció que, el 20 de junio, los militares de la flota rusa del Mar Báltico iniciaron ejercicios en la región de Kaliningrado. En los ejercicios participan los sistemas MLRS Grad y Uragan, los sistemas de artillería de gran calibre 2S5 Giatsint-S, los obuses autopropulsados Msta-S, 2S3 Akatsiya y 2S1 Gvozdika. En los simulacros participan unos mil soldados, según la agencia estatal de noticias rusa RIA Novosti.
Lituania notificó a las autoridades de la región de Kaliningrado que no permitirá el tránsito de mercancías sancionadas por su territorio. Para la región de Kaliningrado, que está aislada de la Rusia continental, esto supone una pérdida repentina de hasta el 50% de las mercancías.
El Consejo de la Federación Rusa declaró que Rusia “tiene vía libre para resolver la cuestión por cualquier medio” si la UE no arregla la situación con el “bloqueo de Kaliningrado”. El Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, dijo anteriormente que creía que la decisión legítima de Lituania no provocaría un conflicto grave en la región.
Mientras tanto, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, calificó la situación de “sin precedentes”, pero admitió que Moscú aún no ha decidido cómo responder a Lituania.
El periodista opositor ruso Alexander Nevzorov recordó que en su día fue la “chispa lituana” la que encendió la mecha de la bomba que destruyó la URSS. “Entonces, Lituania consiguió derrotar a un imperio muy poderoso que todavía estaba vivo. Probablemente, Rusia también se desmoronará, y de nuevo gracias a los “acontecimientos lituanos”. Una y otra vez”, dijo Nevzorov.