El ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, ordenó el miércoles la retirada de las fuerzas rusas de la orilla occidental del río Dnipro ante los ataques ucranianos cerca de la ciudad sureña de Kherson, según los medios estatales rusos.
“La decisión sobre la defensa en la orilla oriental del Dniéper no es fácil”, dijo Shoigu, “al mismo tiempo preservaremos las vidas de nuestros soldados y la capacidad de combate de las formaciones militares”.
La retirada de las tropas rusas se producirá en algún momento “en un futuro próximo”, según Shoigu, aunque todavía no se ha fijado una fecha concreta. Las tropas ocuparán las líneas defensivas ya preparadas en la orilla oriental del río, según Surovikin.
El comandante del Grupo Conjunto de las Fuerzas Rusas en Ucrania, Sergei Surovikin, en un informe dirigido al ministro de Defensa, Sergei Shoigu, pidió que las fuerzas rusas retrocedan al otro lado del río Dnipro para establecer líneas defensivas adecuadas.
“Es aconsejable organizar la defensa a lo largo de la línea de barrera del río Dniéper, a lo largo de su orilla izquierda”, dijo Surovkivin.
“Estoy de acuerdo con sus conclusiones y propuestas”, dijo Shoigu a Surovikin. “Empiecen con la retirada de las tropas y tomen todas las medidas para garantizar el traslado seguro del personal, las armas y el equipo a través del río Dniéper”.
Surovikin también añadió que, a pesar de la llamada urgente a la retirada de las fuerzas en Kherson, las tropas rusas han resistido con éxito los intentos de ofensiva del enemigo a lo largo de toda la línea de contacto.
La importancia de Kherson
Un alto asesor del presidente de Ucrania dijo el miércoles que era demasiado pronto para hablar de una retirada de las tropas rusas de la ciudad sureña de Kherson.
“Hasta que la bandera ucraniana no ondee sobre Kherson, no tiene sentido hablar de una retirada rusa”, dijo Mykhailo Podolyak en declaraciones a Reuters.
“La orilla derecha (oeste) es importante para ambas partes: para (Rusia) para asegurar la firmeza de la defensa de la dirección de Zaporizhzhia, y para (Ucrania) para liberar esta dirección y cortar estas tres importantes arterias: el corredor terrestre hacia Crimea, el agua hacia Crimea y devolver el control de la (planta nuclear)”, dijo Oleh Zhdanov, analista militar.
La ciudad de Kherson es hasta ahora la única capital regional que las fuerzas rusas han capturado desde la invasión del 24 de febrero. Perderla sería, por tanto, un importante golpe simbólico para el Kremlin e indicaría que Rusia ha fracasado -por ahora- en su intento de avanzar hacia las ciudades de Mykolaiv y Odesa, cuya captura había buscado Moscú, dijo Oleksander Musiyenko, analista militar.
“Está claro que la pérdida de Kherson y de la cabeza de puente de Kherson tendrá consecuencias para la imagen de Rusia y será vista negativamente dentro de Rusia”, dijo.
Rusia culpa a Ucrania de bombardear infraestructuras civiles
Surovikin, junto con los medios de comunicación rusos, culpó a Ucrania de bombardear instalaciones del gobierno local, escuelas, hospitales y otras instalaciones de importancia social, así como de atacar a propósito la presa de Kakhovka.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha declarado anteriormente que Rusia está apuntando a la presa para llevar a cabo un ataque de falsa bandera y culpar a Ucrania. Si la presa fuera destruida, advirtió Zelensky, podría devastar el suministro de agua a gran parte del sur y dejar sin agua de refrigeración a la mayor central nuclear de Europa en Zaporizhzhia, según la BBC.
Surovikin alegó anteriormente que las fuerzas ucranianas podrían estar planeando “métodos de guerra prohibidos” en la ciudad de Kherson y en la presa hidroeléctrica y argumentó que eso justificaba la “evacuación” de la población civil, según la BBC. Más de 115.000 personas fueron evacuadas de la región de Kherson hasta ahora, según RIA.
Las autoridades rusas instaladas en Kherson han rechazado las acusaciones de Ucrania sobre un complot para destruir la estructura.
El Instituto para el Estudio de la Guerra, un grupo de expertos independiente con sede en Estados Unidos, ha sugerido que Rusia “probablemente sigue preparando un ataque de falsa bandera” contra la central hidroeléctrica de Kakhovka, creando “condiciones de información” para que las fuerzas rusas hagan volar la presa después de que se retiren del oeste de Kherson y luego acusen a Ucrania de inundar el río y los asentamientos circundantes.