“Estamos dispuestos a trabajar con cualquiera que nos consiga un buen resultado”, afirmó Trump, cuando se le preguntó si la administración colaboraría con China en una vacuna para los estadounidenses, ya sea que China sea la primera en desarrollarla o no.
Las observaciones se produjeron un día después de que los investigadores mencionaran que una vacuna contra el coronavirus desarrollada por la empresa china CanSino Biologics Inc. y la unidad de investigación militar de China parecía ser segura e inducía respuestas inmunológicas en la mayoría de los sujetos en un estudio de etapa intermedia muy vigilado.
El candidato CanSino es una de las pocas vacunas que se han mostrado prometedoras en las primeras pruebas en humanos. Otras que se preparan para tales pruebas incluyen vacunas de la empresa estadounidense Moderna Inc. y de la alemana BioNTech SE, en asociación con la empresa farmacéutica estadounidense Pfizer Inc.
El lunes también se publicaron los datos de un ensayo combinado en fase temprana y media de una candidata a vacuna que están desarrollando los investigadores de la Universidad de Oxford y la empresa británico-sueca AstraZeneca.
Trump ha culpado durante mucho tiempo a China por el mal manejo de la mortal pandemia de coronavirus, que se originó en la ciudad china de Wuhan y se propagó por todo los Estados Unidos, matando a más de 140 mil estadounidenses y aumentando los riesgos de una vacuna rápida y viable.
“Creo que vamos a tener muy buenos resultados. Ya estamos en pruebas. Nadie pensó que eso fuera posible”, manifestó. “Creo que se va a ver algo en el próximo período de tiempo bastante corto, tal vez muy corto, que tiene que ver con la terapéutica y las vacunas que son muy buenas”, concluyó.