Estados Unidos llevó a cabo ataques militares contra los hutíes en Yemen el sábado en respuesta a los ataques del grupo islamista contra el transporte marítimo en el mar Rojo. El presidente Donald Trump advirtió que si los hutíes no detienen su ofensiva, “el infierno lloverá sobre ustedes”.
Trump aseguró que la operación fue una “acción militar decisiva y poderosa” para eliminar la amenaza contra la navegación en la región. Además, subrayó que Estados Unidos aplicará una “fuerza letal abrumadora” hasta alcanzar su objetivo.
El mandatario también envió un mensaje a Irán, principal respaldo de los hutíes, exigiendo el fin inmediato del apoyo al grupo. Advirtió que cualquier amenaza iraní contra Estados Unidos provocará represalias severas: “Los haremos totalmente responsables, ¡y no seremos amables al respecto!”.
El Ministerio de Salud controlado por los hutíes informó que los bombardeos estadounidenses en Saná dejaron al menos nueve civiles muertos y otros nueve heridos. Habitantes de la capital yemení confirmaron que los ataques impactaron un edificio en una zona dominada por la facción armada.
“Las explosiones fueron violentas, sacudieron el barrio como un terremoto y aterrorizaron a nuestras mujeres y niños”, relató un residente identificado como Abdullah Yahia en declaraciones a Reuters.
Desde noviembre de 2023, los hutíes han lanzado más de 100 ataques contra embarcaciones comerciales, justificándolos como una muestra de solidaridad con los palestinos por la guerra entre Israel y Hamás en Gaza. Durante este período, el grupo hundió dos buques, tomó el control de otro y mató a cuatro marinos, afectando gravemente el comercio marítimo global y obligando a las compañías a modificar sus rutas hacia el sur de África.
Además, han atacado repetidamente a Israel con drones y misiles balísticos en el contexto de la guerra en Gaza, causando víctimas mortales.
Durante el mandato de Joe Biden, Estados Unidos intentó debilitar la capacidad ofensiva de los hutíes, aunque con acciones militares limitadas. En cambio, fuentes estadounidenses aseguraron que Trump ha optado por una estrategia más agresiva, alineada con su discurso del sábado.
En Truth Social, Trump acusó a los hutíes de llevar a cabo “una campaña implacable de piratería, violencia y terrorismo” contra embarcaciones y aeronaves de Estados Unidos y otros países. Criticó la gestión de Biden al calificar su respuesta como “patéticamente débil”, lo que habría permitido que los ataques hutíes continuaran sin restricciones.
Este bombardeo es el primero en Yemen desde que entró en vigor el alto el fuego en Gaza en enero. Se produce días después de que los hutíes anunciaran la reanudación de los ataques contra barcos israelíes en el mar Rojo, el Estrecho de Bab al-Mandab y el Golfo de Adén, rompiendo un período de relativa calma iniciado con la tregua en Gaza.