ANKARA – Turquía dijo el martes que el acuerdo de migración de 2016 con la Unión Europea debe ser actualizado a la luz de la crisis en el norte de Siria, ya que las tensiones continuaron encendiéndose en la frontera turco-griega después de que Ankara dijera que ya no detendría a los migrantes que intentan cruzar.
En una entrevista con la agencia de noticias estatal Anadolu, el Ministro de Relaciones Exteriores Mevlut Cavusoglu dijo que la liberalización de los visados de la Unión Europea y la actualización de la unión aduanera del país con el bloque deben aplicarse para ayudar a resolver el problema de los migrantes.
A finales del lunes, el presidente turco Tayyip Erdogan abandonó las reuniones en Bruselas con los líderes de la Unión Europea y la OTAN sin emitir una declaración conjunta ni aparecer en una conferencia de prensa conjunta, como estaba previsto.
Erdogan hizo el viaje a Bruselas cuando se profundizó la disputa sobre la suerte de decenas de miles de migrantes que intentaban entrar en Grecia, miembro de la Unión Europea. El mes pasado, Ankara decidió alentar a la migración para obtener más apoyo y financiación europeos en su esfuerzo militar en la región Idlib de Siria.
Turquía acoge a 3.6 millones de migrantes sirios y ha frenado la migración a Europa en el marco del acuerdo de 2016 a cambio de miles de millones de euros de ayuda. Pero se ha frustrado por lo que considera un apoyo europeo demasiado escaso en la guerra de Siria, donde sus tropas se enfrentaron a las fuerzas gubernamentales respaldadas por Rusia.
El pacto también preveía que la Unión Europea acogiera a miles de refugiados sirios directamente de los campos de Turquía, recompensara a los turcos con viajes sin visado al bloque, acelerara el progreso de las conversaciones para la adhesión a la Unión Europea y mejorara su unión aduanera.