MADRID, España (AP) – Turquía acordó el martes levantar su oposición a que Suecia y Finlandia se unan a la OTAN. Puso fin a un impasse que había enturbiado una cumbre de líderes que se inauguró en Madrid en medio de la peor crisis de seguridad de Europa en décadas, provocada por la guerra en Ucrania.
Tras conversaciones urgentes al más alto nivel con los líderes de los tres países, el secretario general de la alianza, Jens Stoltenberg, dijo que “ahora tenemos un acuerdo que allana el camino para que Finlandia y Suecia se unan a la OTAN”. Lo calificó de “decisión histórica”.
Entre sus muchas consecuencias, la invasión de Ucrania por parte del presidente Vladimir Putin ha llevado a Suecia y a Finlandia a abandonar su estatus de no alineados, mantenido durante mucho tiempo, y a solicitar su ingreso en la OTAN como protección contra una Rusia cada vez más agresiva e imprevisible, que comparte una larga frontera con Finlandia.
Según los tratados de la OTAN, un ataque a cualquier miembro se consideraría un ataque contra todos y desencadenaría una respuesta militar de toda la alianza.
La OTAN funciona por consenso, y el presidente turco Recep Tayyip Erdogan había amenazado con bloquear a la pareja nórdica, insistiendo en que cambiaran su postura sobre los grupos rebeldes kurdos que Turquía considera terroristas.
Tras semanas de diplomacia y horas de conversaciones, el martes, el presidente finlandés Sauli Niinistö dijo que los tres líderes habían firmado un acuerdo conjunto para salir del atolladero.
Turquía dijo que había “conseguido lo que quería”, incluida la “plena cooperación… en la lucha contra” los grupos rebeldes.
Stoltenberg dijo que los líderes de la alianza de 30 naciones emitirán una invitación formal a los dos países para que se unan el miércoles. La decisión tiene que ser ratificada por todas las naciones individualmente, pero dijo que estaba “absolutamente seguro” de que Finlandia y Suecia se convertirían en miembros, algo que podría ocurrir en unos meses.
La primera ministra sueca, Magdalena Andersson, dijo que el acuerdo era “bueno para Finlandia y Suecia. Y es bueno para la OTAN”.
Dijo que completar el proceso de adhesión debería hacerse “cuanto antes mejor”.
“Pero hay 30 parlamentos que deben aprobarlo y nunca se sabe”, dijo Andersson a Associated Press.
Turquía celebró el acuerdo del martes como un triunfo, diciendo que las naciones nórdicas habían acordado tomar medidas enérgicas contra los grupos que Ankara considera amenazas a la seguridad nacional, incluyendo el Partido de los Trabajadores del Kurdistán, o PKK, y su extensión siria. Dijo que también acordaron “no imponer restricciones de embargo en el campo de la industria de defensa” a Turquía y tomar “medidas concretas sobre la extradición de criminales terroristas”.
Turquía ha exigido a Finlandia y Suecia la extradición de personas buscadas y el levantamiento de las restricciones de armas impuestas tras la incursión militar de Turquía en el noreste de Siria en 2019.
Turquía, a su vez, acordó “apoyar en la Cumbre de Madrid de 2022 la invitación de Finlandia y Suecia a convertirse en miembros de la OTAN”.
Los detalles de lo acordado exactamente no estaban claros. Amineh Kakabaveh, un legislador sueco independiente de origen kurdo de cuyo apoyo depende el gobierno para obtener la mayoría en el Parlamento, dijo que era “preocupante que Suecia no revele qué promesas ha hecho a Erdogan”.
Andersson rechazó las sugerencias de que Suecia y Finlandia habían concedido demasiado.
Preguntado sobre si la opinión pública sueca verá el acuerdo como una concesión en temas como las extradiciones de militantes kurdos considerados por Ankara como terroristas, Andersson dijo que “verán que esto es bueno para la seguridad de Suecia.”
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, felicitó a las tres naciones por haber dado un “paso crucial”.
En medio de las especulaciones sobre el papel de EE. UU. en el fin del estancamiento, un alto funcionario de la administración dijo que Washington no ofreció ninguna concesión a Turquía para convencerla de que aceptara un acuerdo. Pero el funcionario dijo que Estados Unidos desempeñó un papel relevante para ayudar a acercar a las dos partes, y Biden habló con Erdogan el martes por la mañana a instancias de Suecia y Finlandia para ayudar a fomentar las conversaciones.
El acuerdo se produjo en la apertura de una cumbre crucial, dominada por la invasión rusa de Ucrania, que marcará el rumbo de la alianza en los próximos años. La cumbre arrancaba con una cena de líderes ofrecida por el Rey Felipe VI de España en el Palacio Real de Madrid, del siglo XVIII.
En las reuniones del miércoles y el jueves, lo más importante es reforzar las defensas contra Rusia y apoyar a Ucrania.
La invasión de Moscú el 24 de febrero sacudió la seguridad europea y trajo al continente bombardeos de ciudades y sangrientas batallas terrestres. La OTAN, que había empezado a centrarse en el terrorismo y otras amenazas no estatales, ha tenido que enfrentarse de nuevo a una Rusia adversa.
Biden dijo que la OTAN estaba “tan unida y galvanizada como creo que hemos estado nunca”.
El ataque de un misil ruso el lunes sobre un centro comercial en la ciudad central ucraniana de Kremenchuk fue un sombrío recordatorio de los horrores de la guerra. Algunos consideraron que el momento elegido, cuando los líderes del Grupo de los Siete se reunían en Alemania y justo antes de la reunión de la OTAN, era un mensaje de Moscú.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, que tiene previsto dirigirse a los líderes de la OTAN por vídeo el miércoles, calificó el ataque al centro comercial de acto “terrorista”.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, viajó a Madrid para instar a la alianza a proporcionar a su país “lo que sea necesario” para detener la guerra.
“Despertad, chicos. Esto está ocurriendo ahora. Vais a ser los siguientes, esto va a llamar a vuestra puerta en un abrir y cerrar de ojos”, dijo Klitschko a los periodistas en la sede de la cumbre.
Stoltenberg dijo que la reunión trazaría un plan para la alianza “en un mundo más peligroso e impredecible”, y eso significa que “tenemos que invertir más en nuestra defensa”, dijo Stoltenberg. Solo nueve de los 30 miembros de la OTAN cumplen el objetivo de la organización de gastar el 2 % del producto interior bruto en defensa. España, país anfitrión de la cumbre, gasta apenas la mitad.
Stoltenberg dijo el lunes que los aliados de la OTAN acordarán en la cumbre aumentar la fuerza de reacción rápida de la alianza casi ocho veces, de 40.000 a 300.000 soldados. Las tropas tendrán su base en sus países de origen, pero se dedicarán a países específicos del flanco oriental de la OTAN, donde la alianza planea acumular reservas de equipos y municiones.
Debajo de la superficie, hay tensiones dentro de la OTAN sobre cómo terminará la guerra y qué concesiones debe hacer Ucrania, si es que hace alguna, para poner fin a los combates.
También hay diferencias sobre la dureza de la línea a seguir con China en el nuevo Concepto Estratégico de la OTAN, el conjunto de prioridades y objetivos que se establece una vez por década. El último documento, publicado en 2010, no mencionaba a China en absoluto.
Se espera que el nuevo concepto establezca el enfoque de la OTAN en cuestiones que van desde la ciberseguridad hasta el cambio climático, pasando por el creciente alcance económico y militar de China y la creciente importancia y poder de la región Indo-Pacífica. Por primera vez, los líderes de Japón, Australia, Corea del Sur y Nueva Zelanda asistirán a la cumbre como invitados.
Algunos miembros europeos desconfían de la línea dura de Estados Unidos con respecto a Pekín y no quieren que China sea considerada un adversario.
En el Concepto Estratégico, la OTAN está dispuesta a declarar a Rusia su amenaza número uno.
La agencia espacial estatal rusa, Roscosmos, marcó la apertura de la cumbre publicando imágenes de satélite y coordenadas de la sala de conferencias de Madrid, donde se celebra, junto con las de la Casa Blanca, el Pentágono y las sedes gubernamentales de Londres, París y Berlín.
La agencia dijo que la OTAN iba a declarar a Rusia como enemigo en la cumbre, y añadió que publicaba las coordenadas precisas “por si acaso”.