Turquía y Chipre, muy enfrentados por sus derechos en el Mediterráneo, reclamaron el miércoles el apoyo de la Unión Europea en vísperas de una cumbre de líderes en la que el bloque dividido discutirá las posibles sanciones a Ankara.
Turquía anunció que espera que la UE tome medidas concretas en su reunión del 1 y 2 de octubre para actualizar un acuerdo migratorio para 2016 y una unión aduanera, mientras que Chipre, miembro del bloque, pidió solidaridad y acción contra Ankara.
Chipre está negando su consentimiento a las sanciones de la UE a Bielorrusia porque quiere medidas más duras del bloque a Turquía, que dice que está violando su territorio marítimo en la búsqueda de hidrocarburos.
Grecia, también miembro de la UE, apoya la posición de Chipre, incluso mientras que Atenas acordó reanudar las conversaciones con Ankara para abordar la disputa que se intensificó en los últimos meses. Turquía desestima las críticas y menciona que está protegiendo su jurisdicción marítima legal.
El ministro de Relaciones Exteriores Mevlut Cavusoglu, hablando en la agencia estatal de noticias Anadolu TV, señaló que Turquía esperaba que la UE continuara con el impulso positivo obtenido de los esfuerzos diplomáticos para establecer un diálogo con Grecia.
Instó a que se actualice el acuerdo de 2016 según el cual Ankara frenó las entradas de migrantes a Europa a cambio de ayuda financiera y de viajes sin visado en la región de Schengen. “Estas cosas no pueden ser unilaterales y esa es nuestra expectativa”, añadió.
Los líderes de la UE abordarán las tensiones del Mediterráneo oriental el jueves. Las conversaciones sobre las sanciones a Turquía se han desvanecido desde que Atenas y Ankara avanzaron hacia el diálogo, aunque el riesgo ha pesado sobre la lira turca que ha alcanzado mínimos históricos este mes.
Chipre ha pedido repetidamente sanciones. Después de una reunión con su homólogo español Arancha González Laya, el ministro de Relaciones Exteriores chipriota, Nikos Christodoulides, afirmó: “Chipre espera que la UE y sus socios sean solidarios en la acción”.
“Defender concretamente nuestros valores e intereses comunes y aplicar nuestras propias decisiones es esencial”, añadió.
Antes de la cumbre también, el presidente turco Tayyip Erdogan envió una carta a los líderes de la UE, excluyendo a Grecia y Chipre, indicando que Grecia y los grecochipriotas causaron la tensión regional, añadiendo que espera que muestren un enfoque imparcial el jueves.
“Nuestra expectativa de la UE es permanecer objetivos, tratar a todos por igual y apoyar el diálogo y la cooperación”, manifestó Erdogan en la carta enviada el miércoles.