KIEV, Ucrania – La central nuclear de Chernóbil, escenario de la peor catástrofe nuclear del mundo en 1986, y sus sistemas de seguridad han quedado totalmente desconectados, informó el miércoles el operador energético ucraniano Ukrenergo.
La planta “quedó totalmente desconectada de la red eléctrica”, dijo Ukrenergo en un comunicado en su página de Facebook, añadiendo que las operaciones militares significaban que “no hay posibilidad de restaurar las líneas”.
El impacto del corte de energía no estaba inmediatamente claro.
El 24 de febrero, Rusia invadió Ucrania y se apoderó de la desaparecida central, escenario de una catástrofe en 1986 que mató a cientos de personas y extendió la contaminación radiactiva hacia el oeste de Europa.
El martes, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), organismo de control de la ONU, declaró que la central había dejado de transmitir datos y expresó su preocupación por el personal que trabajaba bajo vigilancia rusa.
La situación del personal “estaba empeorando”, dijo el OIEA, citando al regulador nuclear ucraniano.
La extinta central se encuentra dentro de una zona de exclusión que alberga reactores clausurados e instalaciones de residuos radiactivos.
Más de 2.000 personas siguen trabajando en la planta, que requiere una gestión constante para evitar otro desastre nuclear.
El director general del OIEA, Rafael Grossi, pidió el martes “a las fuerzas que tienen el control efectivo del emplazamiento que faciliten urgentemente la rotación segura del personal allí”.
También repitió su oferta de viajar a Chernóbil o a cualquier otro lugar para garantizar “el compromiso con la seguridad” de las centrales ucranianas de todas las partes.