La familia de Virginia Giuffre, estadounidense y australiana, confirmó su muerte por suicidio en su granja de Australia Occidental. A los 41 años, Giuffre dejó un legado marcado por denuncias de abuso sexual contra Jeffrey Epstein y el príncipe Andrés.
En un comunicado a la AFP, su agente reveló que Giuffre murió la noche del viernes. La familia expresó dolor profundo: “Nuestra querida Virginia murió tras años de sufrimiento por abuso y tráfico sexual”.
Giuffre señaló a Epstein como responsable de explotarla sexualmente y afirmó que, a los 17 años, mantuvo relaciones con el príncipe Andrés, presentados por el multimillonario. En 2019, Epstein se suicidó en una prisión de Nueva York mientras enfrentaba cargos por delitos sexuales.
El príncipe Andrés rechazó las acusaciones de agresión sexual. Para evitar un juicio, pagó un acuerdo millonario que incluyó una donación a una organización de apoyo a víctimas de trata de personas.
Conmovida, la familia destacó el valor de Giuffre: “Su coraje y amor dejaron una huella imborrable. Su pérdida nos destroza”. Añadieron que el peso del abuso resultó insoportable para ella, pero confían en que ahora descansa en paz.
Autoridades de Australia Occidental informaron que los servicios de emergencia atendieron a una mujer de 41 años hallada inconsciente en una vivienda en Neergabby, al norte de Perth, el viernes por la noche. Pese a los esfuerzos, la declararon muerta en el lugar.