El líder chino Xi Jinping llegó el jueves a Hong Kong para conmemorar el vigésimo quinto aniversario de la entrega del territorio a China, un aniversario que su gobierno ha celebrado como el comienzo de una “nueva era”, incluso cuando los críticos señalaron la represión de Pekín en las protestas prodemocráticas de 2019-2020.
La visita de Xi a Hong Kong marcó su primer viaje fuera de la China continental desde la propagación del virus Covid-19 en diciembre de 2019. Además de conmemorar el aniversario del traspaso de poderes, el líder chino tomó juramento al nuevo jefe ejecutivo de Hong Kong, John Lee -cuyo papel como jefe de seguridad de Hong Kong durante las monumentales protestas de 2019-2020 del territorio llevó a su inclusión en una lista de sanciones de Estados Unidos-. Lee sustituye a la controvertida jefa del Ejecutivo, Carrie Lam, que dirigió el gobierno de Hong Kong durante las protestas y la posterior aprobación de una amplia ley de seguridad nacional que recorta la libertad política en la ciudad. Lam también supervisó la respuesta de Hong Kong a la pandemia del virus Covid-19, que incluyó controles fronterizos extremadamente estrictos y cierres locales para mantener la política gubernamental de “cero coronavirus”.
Aunque los festejos para conmemorar el traspaso comenzaron el jueves por la mañana con una ceremonia de izado de bandera en el puerto de Victoria, Xi no llegó hasta la tarde. En el período previo a su entrada, miles de policías de Hong Kong se desplegaron por todo el territorio para mantener el orden y desalentar nuevas protestas.
“Mi corazón -y el del gobierno central- está siempre con los compatriotas de Hong Kong”, dijo el líder chino a la prensa nada más entrar en la ciudad, que, según dijo, había “resurgido de las cenizas” tras su cesión por el Reino Unido.
Durante su época colonial, Gran Bretaña se anexionó la isla de Hong Kong tras el final de la Primera Guerra del Opio en 1842 y se aseguró los “Nuevos Territorios”, la región peninsular más extensa del territorio, mediante un contrato de arrendamiento de noventa y nueve años en 1898. Aunque el gobierno chino de Mao y Deng Xiaoping presionó a Londres para que devolviera los territorios antes de que expirara el contrato de arrendamiento, finalmente se devolvió todo el territorio en la fecha prevista, el 1 de julio de 1997.
En las últimas semanas, el gobierno chino causó controversia en Hong Kong al presentar una nueva edición de los libros de texto de historia del territorio, en la que se afirma que éste nunca ha pertenecido formalmente a Gran Bretaña, ya que el gobierno chino no reconoce los “tratados desiguales” de cesión de la isla. Los libros de texto también se refieren a las protestas de 2019-2020 como “eventos severamente violentos … que representan una amenaza para la soberanía, la seguridad nacional y los beneficios de Hong Kong” y alegan que habían sido organizados por “fuerzas extranjeras” no especificadas.