La central nuclear ucraniana de Zaporizhzhia volvió a perder su línea principal de conexión a la red eléctrica nacional el sábado, mientras continuaban los bombardeos alrededor de la instalación.
La desconexión de la central por segunda vez es significativa por un par de razones: en primer lugar, por los rumores de que Rusia se está preparando para redirigir la energía producida por la central a las zonas de Ucrania controladas por Rusia, y en segundo lugar, por la presencia de una misión del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Los inspectores del organismo de vigilancia nuclear de las Naciones Unidas llegaron a la instalación de Zaporizhzhia el jueves, después de que se les negara inicialmente el acceso desde el territorio controlado por Ucrania. El equipo recorrió la instalación y posteriormente anunció que tiene previsto mantener una presencia a largo plazo en la instalación para garantizar que siga siendo segura y operativa.
El personal del OIEA que sigue presente en la instalación fue informado de que el sábado se cayó la cuarta línea eléctrica de 750 kv, la única que quedaba en la planta. Sin embargo, la planta pudo permanecer en línea y segura gracias al apoyo de una central térmica cercana que suministra energía a la instalación a través de una red externa.
El OIEA reveló en un comunicado que dos unidades operativas también fueron desconectadas el sábado debido a las restricciones de la red.
“La misma unidad 5 fue desconectada también el 1 de septiembre -el día de la llegada del Director General Grossi a las instalaciones- debido a un fallo eléctrico, pero fue reconectada al día siguiente”, dice el comunicado.
El director general del OIEA, Rafael Mariano Grossi, también confirmó en el comunicado que el equipo recibió “información directa, rápida y fiable” sobre los acontecimientos, y que ahora conocen mejor la funcionalidad de la línea eléctrica de reserva de la central.
Grossi también reafirmó su compromiso de mantener una presencia “permanente” en la instalación, y describió la capacidad de su equipo de seguir de cerca las operaciones de la planta como un “cambio de juego”.
Los rusos utilizan Zaporizhzhia como “arma nuclear”
Durante una entrevista con David Muir de ABC World News Tonight, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenski acusó a Rusia de utilizar la planta nuclear como un “arma nuclear”.
“Verá, han ocupado nuestra central nuclear, seis bloques. La más grande de Europa. Significa seis Chernobyls; significa el mayor peligro de Europa. Así que la ocuparon. Así que eso es… significa que usan un arma nuclear. Eso es [un] arma nuclear”, dijo el presidente ucraniano, añadiendo que no debería haber presencia militar de ninguna de las partes en el lugar.
“No debería haber personal militar. No debería haber ningún equipo militar en el territorio. Y no debería haber trabajadores de la central nuclear rodeados de gente con armas de fuego”, continuó.
La presencia de personal militar ruso en las instalaciones ha llevado a varios líderes y representantes mundiales a acusar a Rusia de utilizar la planta como “escudo”, aunque el Kremlin defiende su presencia militar alegando que las instalaciones corren el riesgo de sufrir ataques militares ucranianos, ataques que nunca se producirían si Rusia no estuviera almacenando munición y equipo militar en los terrenos de la planta.