Un importante aliado del presidente ruso Vladimir Putin se reunió el miércoles con el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, en un viaje para profundizar en la cooperación comercial y de seguridad, mientras Moscú busca apuntalar su economía y reforzar su esfuerzo bélico en Ucrania.
La visita del secretario del Consejo de Seguridad ruso, Nikolai Patrushev, fue una señal de la creciente importancia de Irán como socio solidario y proveedor de armas en un momento en que Moscú está aislado por las sanciones occidentales y se enfrenta a una intensa presión militar ucraniana.
Con la “operación militar especial” de Rusia en Ucrania en su noveno mes, Raisi y Patrushev discutieron “varios temas de cooperación ruso-iraní en el campo de la seguridad, así como una serie de problemas internacionales”, dijo la agencia de noticias Interfax.
Los medios de comunicación estatales rusos dijeron que Patrushev discutió la situación en Ucrania y las medidas para combatir la “interferencia occidental” en los asuntos internos de ambos países con su homólogo de seguridad iraní Ali Shamkhani.
NourNews, afiliado al máximo organismo de seguridad iraní, dijo que Shamkhani pidió que se estrecharan los lazos en toda una serie de sectores, desde la energía hasta la banca.
“Irán acoge y apoya cualquier iniciativa que conduzca a un alto el fuego y a la paz entre Rusia y Ucrania sobre la base del diálogo, y está dispuesto a desempeñar un papel en el fin de la guerra”, dijo Shamkhani.
Rusia utiliza drones iraníes Shahed-136
Kiev y Occidente afirman que Rusia ha utilizado drones iraníes Shahed-136 para atacar las infraestructuras energéticas ucranianas en las últimas semanas, obligando a Ucrania a introducir apagones en las principales ciudades, incluida la capital, para preservar la energía.
Irán reconoció por primera vez el fin de semana que suministró drones a Moscú, pero dijo que sólo envió un pequeño número y que fueron enviados antes de que comenzara la guerra. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, lo calificó de mentira.
El mes pasado, dos altos funcionarios y dos diplomáticos iraníes dijeron a Reuters que Irán había prometido proporcionar a Rusia misiles tierra-tierra, además de más drones.
Rusia ha acelerado sus esfuerzos para establecer relaciones económicas, comerciales y políticas con Irán y otros países no occidentales desde que invadió Ucrania el 24 de febrero, en un intento de destruir lo que llama la “hegemonía” de Estados Unidos y construir un nuevo orden internacional.