RIAD, Arabia Saudita – El gabinete de Arabia Saudita condenó el martes lo que calificó de “mentiras” de su rival Irán sobre su programa nuclear, tras la decisión de Teherán de reiniciar las actividades atómicas en uno de sus lugares clave.
Una reunión de gabinete presidida por el rey Salman expresó su “denuncia por las continuas mentiras y demoras de Irán en proporcionar la información requerida sobre su programa nuclear al OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica)”, según la Agencia Saudita de Prensa oficial.
El OIEA, el organismo de control nuclear de la ONU, dijo el lunes en un informe que partículas de uranio fueron detectadas en un sitio no declarado en Irán.
El informe también confirma que Irán ha acelerado su enriquecimiento de uranio, en violación de un acuerdo histórico de 2015 con las potencias internacionales.
Las potencias europeas han estado tratando de salvar el acuerdo desde que los Estados Unidos se retiraron unilateralmente de él en mayo del año pasado y comenzaron a reimponer sanciones.
Un año después de la retirada de Estados Unidos del Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA), Irán comenzó a reducir sus compromisos con el acuerdo con la esperanza de obtener concesiones de los que aún son parte del acuerdo.
La última medida de Irán llegó la semana pasada, cuando los ingenieros comenzaron a alimentar con gas de hexafluoruro de uranio a las centrifugadoras de enriquecimiento que antes estaban bloqueadas en la planta subterránea de Fordo, al sur de Teherán.
El lunes, Gran Bretaña, Francia, Alemania y la Unión Europea dijeron que la decisión de Irán de reiniciar las actividades en Fordo era “inconsistente” con el acuerdo nuclear de 2015.
Irán, a su vez, acusó el martes a las naciones europeas de hipocresía por criticar a Teherán mientras que no cumplían con sus compromisos de alivio de las sanciones estadounidenses.