El gobierno de Biden parece estar repitiendo la política del gobierno de Obama de optar por el silencio ante el derramamiento de sangre del régimen iraní, las violaciones de los derechos humanos y las medidas represivas que matan y hieren a los manifestantes pacíficos.
Recientemente, un gran número de personas en la provincia de Isfahan se levantó contra la República Islámica. Decenas de miles de agricultores y otros manifestantes salieron a la calle y criticaron a los funcionarios del gobierno por la grave escasez de agua. A muchos se les oyó corear: “El pueblo de Isfahan preferirá morir antes que ceder a la desgracia”; “Zayandeh Rud [río] es nuestro derecho innegable”; y “No nos iremos a casa hasta que nos devuelvan el agua”.
Mientras el régimen cortaba el acceso a Internet, las fuerzas de seguridad dispararon escopetas y gases lacrimógenos contra los manifestantes, con el resultado de muertos y cientos de heridos. Cuando #BloodyFriday comenzó a ser tendencia en twitter, Mohammad-Reza Mir-Heidari, jefe de la policía de Isfahan, amenazó con “hacer frente” a los manifestantes.
La organización Iranian-Americans for Liberty ha pedido al gobierno de Biden que se solidarice con los manifestantes:
“Pedimos al presidente Joe Biden, al secretario Antony Blinken y a todos los miembros del Congreso que se solidaricen con el pueblo iraní. La diplomacia con el principal patrocinador del terrorismo en el mundo nunca va a producir un resultado favorable que beneficie al pueblo estadounidense o al pueblo iraní. La diplomacia con la República Islámica estaba destinada al fracaso desde el primer día”.
El régimen iraní no parece tener una solución práctica para la escasez de agua. Sigue gestionando mal la economía, gasta los recursos del país en sus apoderados y grupos de milicianos, y destina una parte importante del agua de la nación a los proyectos del régimen. “No estamos en condiciones de satisfacer sus necesidades de agua”, admitió el ministro de Energía ante las protestas. En cambio, el régimen ha recurrido a su habitual modus operandi de reprimir con fuerza bruta a quienquiera que proteste.
A lo largo de todo esto, la Administración Biden permanece en silencio, al igual que hizo la Administración Obama durante los levantamientos nacionales de 2009 en Irán. Como dijo Mitt Romney en 2012:
“[C]uando millones de iraníes salieron a las calles en junio de 2009, cuando exigieron la libertad de un régimen cruel que amenaza al mundo, cuando gritaron: “¿Estás con nosotros o estás con ellos?”, el presidente estadounidense guardó silencio”.
Tal y como lo describió el Consejo de Relaciones Exteriores, organismo no partidista:
“Si bien Obama optó inicialmente por una respuesta silenciosa, la violenta represión del régimen iraní contra los partidarios de la oposición complicó el intento de su administración de equilibrar el acercamiento con su defensa de los derechos humanos”.
Las últimas protestas no se limitan a los agricultores. En las últimas semanas, los jubilados y pensionistas han protagonizado más de una docena de protestas, cada una de ellas en varias ciudades. La más reciente de estas protestas adoptó lemas como “No hemos visto justicia; no votaremos más”.
Karmel Melamed, periodista y comentarista iraní-estadounidense, publicó en Twitter:
“¡Imágenes horribles de mis compatriotas en la ciudad iraní de Isfahan siendo masacrados por los despiadados matones del régimen de los ayatolás y el aparato de seguridad por protestar pacíficamente contra el régimen! Esta mujer mayor fue disparada a sangre fría en las calles. ¿Estás viendo esto @StateDept?”-
Masih Alinejad, activista y periodista iraní-estadounidense a quien el régimen iraní planeó secuestrar en Nueva York, tuiteó:
“Esto es lo que está ocurriendo en Irán ahora mismo. La gente salió a la calle en Isfahan para una protesta pacífica, pero está siendo reprimida violentamente por el régimen. Occidente está ocupado en conseguir un acuerdo nuclear. Deben advertir a la República Islámica que habrá consecuencias por esa brutalidad”.
Y Sheina Vojoudi, disidente iraní, se hizo eco de lo que creen muchos iraníes al declarar al Jerusalem Post:
“Los iraníes de otras ciudades han anunciado que protestarán para apoyar al pueblo de Isfahan. Ahora los iraníes sabemos exactamente que el enemigo de nuestra nación ha ocupado nuestro país desde 1979 y que debemos liberar nuestro país. Esto es algo seguro que ocurrirá muy pronto. Si el mundo libre quiere estar en el lado correcto de la historia, debe apoyar al pueblo iraní que lleva 43 años luchando por su libertad. Los iraníes necesitan un internet libre porque el régimen ya ha cerrado el internet en Isfahan. Quieren matar a los manifestantes como en noviembre de 2019 y eso debe ser detenido. Pronto Khuzestan, Yazd y otras ciudades también saldrán a la calle y se enfrentarán al mismo peligro”-
¿Estará la administración Biden al lado del pueblo iraní? Al guardar silencio, la administración Biden está dando poder, envalentonando y validando las violaciones de los derechos humanos de los mulás gobernantes y la brutal supresión de muchas personas en Irán.