El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, criticó el viernes a Irán y dijo que no se toma en serio la reactivación del acuerdo nuclear de 2015.
“Lo que hemos visto en los últimos dos días es que Irán, en este momento, no parece ser serio en cuanto a hacer lo necesario para volver a cumplir con el acuerdo, razón por la cual terminamos esta ronda de conversaciones en Viena”, dijo Blinken durante la conferencia Reuters Next, después de que se suspendiera la última ronda de conversaciones indirectas.
Advirtió que Estados Unidos no dejará que Irán alargue el proceso mientras sigue avanzando en su programa nuclear y subrayó que Washington buscará otras opciones si la diplomacia fracasa.
Un portavoz del Departamento de Estado dijo que Irán no acudió a Viena con propuestas constructivas.
“Las primeras seis rondas de negociaciones hicieron progresos, encontrando soluciones de compromiso creativas para muchos de los temas más difíciles para todas las partes. El enfoque de Irán esta semana no fue, lamentablemente, tratar de resolver las cuestiones pendientes”, dijo el portavoz.
“La nueva administración iraní no vino a Viena con propuestas constructivas”, añadió el funcionario.
Los comentarios de Blinken se produjeron después de que los funcionarios europeos expresaran su consternación por las exigencias de la nueva administración iraní de línea dura en las conversaciones nucleares con Occidente.
Los diplomáticos dijeron que la delegación iraní había propuesto cambios radicales en un texto que se negoció minuciosamente en rondas anteriores y que, según los funcionarios europeos, estaba terminado en un 70-80%.
“Hace más de cinco meses, Irán interrumpió las negociaciones. Desde entonces, Irán ha acelerado su programa nuclear. Esta semana, ha dado marcha atrás en los avances diplomáticos realizados”, señalaron altos funcionarios de Francia, Gran Bretaña y Alemania en un comunicado, añadiendo que Irán exigía “cambios importantes” en el texto.
“No está claro cómo pueden cerrarse estas nuevas brechas en un plazo realista”, añadieron.
En respuesta, el máximo negociador iraní dijo que las partes europeas pueden proponer sus propios borradores para su discusión.
Irán ha reducido gradualmente su cumplimiento del acuerdo nuclear de 2015 que firmó con las potencias mundiales en respuesta a la retirada del acuerdo por parte del expresidente estadounidense Donald Trump en mayo de 2018.
Irán ha exigido en repetidas ocasiones que Estados Unidos levante las sanciones impuestas a la República Islámica y también que le asegure que no abandonará el acuerdo de nuevo como condición previa para que vuelva a cumplirlo.
Funcionarios estadounidenses han dicho que, aunque prefieren la vía diplomática para llegar a un acuerdo con Irán, hay otras opciones sobre la mesa en caso de que eso falle.
El enviado de EE.UU. para Irán, Robert Malley, dijo la semana pasada que Washington no se “sentará de brazos cruzados” ante Irán si se demora en volver al acuerdo nuclear.
Por su parte, el general Kenneth McKenzie, máximo comandante de EE.UU. en Oriente Medio, afirmó que Irán está “muy cerca” de una bomba nuclear y que sus fuerzas están preparadas con una posible opción militar si fracasan las conversaciones con la República Islámica.