WASHINGTON – Estados Unidos impuso el jueves sanciones a los productores de petróleo y gas iraníes, así como a los intermediarios chinos e indios, ampliando la presión en medio del estancamiento de las negociaciones para restaurar un acuerdo nuclear.
La administración del presidente estadounidense Joe Biden dijo que seguía comprometida con la diplomacia con Irán para restaurar un acuerdo de 2015 para frenar su programa nuclear.
“En ausencia de un acuerdo, seguiremos utilizando nuestras autoridades sancionadoras para limitar las exportaciones de petróleo, productos derivados del petróleo y productos petroquímicos procedentes de Irán”, dijo Brian Nelson, alto funcionario del Departamento del Tesoro.
El Departamento del Tesoro dijo que estaba imponiendo sanciones a una red de empresas petroquímicas iraníes, incluidas supuestas empresas de fachada en China y los Emiratos Árabes Unidos para la empresa estatal iraní y Triliance, una empresa con sede en Hong Kong ya sometida a sanciones estadounidenses por sus tratos con Irán.
También adoptó medidas contra el corredor con sede en China Jeff Gao y el ciudadano indio Mohammad Shaheed Ruknooddin Bhore por gestionar supuestamente negocios para Triliance.
Estados Unidos ha tratado de impedir que cualquier nación compre petróleo iraní desde 2018, después de que el entonces presidente estadounidense Donald Trump se alejara de un acuerdo negociado, en el que Irán redujo drásticamente su programa nuclear a cambio de promesas de alivio de las sanciones.
China ha seguido siendo el principal comprador de petróleo iraní, mientras que la India puso fin a las importaciones a regañadientes bajo la presión de Estados Unidos.
Biden ha tratado de restablecer el acuerdo nuclear, afirmando que Estados Unidos aliviaría las sanciones si Irán vuelve a cumplirlo, pero su negociador jefe dijo recientemente que era más probable que la diplomacia fracasara.
Irán ha insistido en que Estados Unidos retire una designación de la época de Trump de su poderosa Guardia Revolucionaria como organización terrorista, una medida que Biden ha rechazado por considerarla periférica a las discusiones sobre el acuerdo nuclear.