Reino Unido, Francia y Alemania activarán el mecanismo de resolución de disputas en el acuerdo nuclear de 2015 con Irán, dijeron el martes dos diplomáticos de Europa, el mayor paso que han dado los europeos en respuesta a la retirada de Teherán de sus compromisos nucleares.
En uno de los llamamientos más fuertes de Europa para un nuevo acuerdo que reemplace el acuerdo de 2015 que Washington abandonó hace dos años, el primer ministro británico Boris Johnson dijo que el camino a seguir era acordar un nuevo “Acuerdo Trump”.
Los aliados europeos de Washington han tratado de evitar que el acuerdo nuclear se derrumbe desde que el presidente Donald Trump retiró a Estados Unidos de él en 2018. Según el acuerdo, se levantaron las sanciones internacionales contra Irán a cambio de que Teherán aceptara frenar su programa nuclear.
Pero Washington ha vuelto a imponer sanciones, negando a Irán la mayoría de los beneficios económicos. Irán ha respondido excediendo gradualmente muchas de las limitaciones que había firmado en el acuerdo. Este mes dijo que abandonaría los límites a su producción de uranio enriquecido, un paso que los europeos dijeron que probablemente les obligaría a responder.
Los diplomáticos europeos dijeron que Reino Unido, Francia y Alemania notificarán a la Unión Europea más tarde el martes que están activando el mecanismo de resolución de disputas.
Según el mecanismo esbozado en el acuerdo, la Unión Europea informaría entonces a las otras partes, Rusia y China, así como el propio Irán. Habrá entonces 15 días para resolver las diferencias, un plazo que puede ser ampliado por consenso.
El proceso puede conducir en última instancia a un “snapback”, la reimposición de las sanciones en vigor en virtud de anteriores resoluciones de la ONU.
“En un momento dado tenemos que mostrar nuestra credibilidad”, dijo uno de los diplomáticos europeos. El segundo diplomático dijo: “Nuestra intención no es restablecer las sanciones, sino resolver nuestras diferencias a través del mismo mecanismo que se creó en el acuerdo”.
La salida de Washington del acuerdo nuclear, y las graves dificultades económicas causadas por las sanciones estadounidenses que le siguieron, han alimentado una de las mayores escaladas de hostilidad entre Estados Unidos e Irán desde la Revolución Islámica de Irán de 1979.
Esto se ha acelerado bruscamente desde el 3 de enero, cuando Estados Unidos mató al comandante militar iraní más poderoso, Qassem Soleimani, en un ataque con aviones no tripulados en Bagdad.
El 8 de enero, Irán derribó accidentalmente un avión de pasajeros ucraniano cuando sus fuerzas estaban en alerta máxima tras los ataques a objetivos estadounidenses. Después de días de negarlo, las autoridades iraníes reconocieron la responsabilidad del accidente y desde entonces han tenido que enfrentarse a días de manifestaciones contra el gobierno en su país.
Trump dice que su objetivo al renunciar al acuerdo nuclear era obligar a Irán a firmar un pacto más estricto. Teherán dice que no lo renegociará mientras se apliquen las sanciones de Estados Unidos.
El británico Johnson, un conservador que se ha presentado como un aliado de Trump que puede ayudar a salvar la brecha diplomática entre Estados Unidos y Europa, dijo que quería evitar un conflicto militar con Irán.