Teherán afirma que Israel lidera una coalición para interrumpir negociaciones nucleares, mientras ambas partes avanzan en reuniones técnicas en Omán.
Irán denuncia presiones israelíes en plena etapa de diálogo técnico
Esmail Baqaei, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní, señaló el 21 de abril de 2025 que Israel intenta sabotear el proceso diplomático entre Irán y Estados Unidos, acusándolo de encabezar una “coalición” con ese objetivo. Aunque no presentó pruebas, afirmó que las acciones israelíes buscan desestabilizar las negociaciones nucleares, en una etapa considerada crítica por ambas partes.
Las declaraciones se dieron tras dos rondas de conversaciones indirectas entre Teherán y Washington celebradas en Muscat y Roma los días 12 y 19 de abril, respectivamente, calificadas como “constructivas”. Las negociaciones continuarán el 23 de abril con encuentros técnicos en Omán.
Contexto diplomático y militar del diálogo nuclear Irán-EE. UU.
- Israel ha preparado planes militares para atacar instalaciones nucleares iraníes, según tres fuentes citadas por Reuters el 19 de abril de 2025.
- Donald Trump rechazó las propuestas israelíes y optó por una vía diplomática, tras detectar voluntad de diálogo en Irán.
- El enviado estadounidense Steve Witkoff y el ministro iraní Abbas Araghchi encabezan las negociaciones nucleares.
- Irán posee 274.8 kg de uranio enriquecido al 60%, según la IAEA, lo que preocupa a Occidente.
- La Unión Europea reafirmó que no existe alternativa a la diplomacia, según Al Jazeera.
Un funcionario israelí confirmó que su país mantiene abierta la posibilidad de una ofensiva militar. Dichos planes contemplan ataques aéreos combinados con operativos de comando, con el objetivo de retrasar el programa nuclear iraní durante meses. Las autoridades israelíes ya presentaron estos planes a Estados Unidos, solicitando apoyo logístico y militar. No obstante, Trump los rechazó a inicios de abril, al considerar viable la vía diplomática.
Las actuales conversaciones nucleares están enfocadas en establecer un marco que limite el enriquecimiento de uranio iraní y asegure supervisión internacional. Según Al Jazeera, ambas partes acordaron comenzar discusiones técnicas sobre niveles de enriquecimiento, reservas nucleares y mecanismos de verificación. Irán expresó disposición a aceptar límites si recibe a cambio alivio de sanciones, pero rechaza entregar su uranio a terceros países, propuesta planteada por EE. UU., de acuerdo con The Guardian.
Israel plantea medidas unilaterales ante estancamiento diplomático
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió tras su reunión con Trump el 7 de abril que Israel podría actuar por su cuenta si no hay resultados concretos. Comparó el proceso actual con el desmantelamiento del programa nuclear de Libia en 2003 y exigió garantías para eliminar por completo las capacidades nucleares de Irán. Esta posición alimenta la percepción iraní de que Israel intenta interrumpir las negociaciones.
Un alto funcionario iraní dijo a Reuters que Teherán conoce los planes militares de Israel y advirtió que cualquier ataque provocará una “respuesta dura e inquebrantable”. Las tensiones se enmarcan en la ruptura del JCPOA por parte de EE. UU. en 2018 bajo Trump, quien impuso nuevas sanciones. En respuesta, Irán acumuló uranio enriquecido por encima del límite acordado, alcanzando un nivel cercano al necesario para armas nucleares, según la IAEA en marzo de 2025.
Desde marzo, la Casa Blanca inició un nuevo enfoque con una carta de Trump al líder supremo iraní, Ali Jamenei. Este giro busca un acuerdo a corto plazo que evite una escalada militar. Sin embargo, dentro del gobierno estadounidense hay discrepancias: Witkoff promueve una estrategia más flexible, mientras Marco Rubio y Mike Waltz presionan por una postura más estricta, según The New York Times.
En Irán, el presidente Masoud Pezeshkian apoya las negociaciones para aliviar las sanciones económicas, aunque enfrenta resistencia interna de sectores conservadores cercanos a Jamenei. Estos rechazan cualquier concesión a Occidente, especialmente tras la pérdida de aliados regionales como Bashar al-Asad, y el debilitamiento de grupos aliados en Líbano, Gaza y Yemen, según CNN.
Omán y Roma como sedes del diálogo indirecto
Omán ha desempeñado un rol central como mediador. Su canciller, Badr Albusaidi, facilitó las rondas indirectas de negociación. La decisión de trasladar la segunda reunión a Roma fue impulsada por Trump, quien buscó involucrar a Giorgia Meloni, primera ministra de Italia, y excluir a otras potencias europeas como Francia, Alemania y Reino Unido, informó The Guardian.
La Unión Europea reiteró su respaldo a la vía diplomática, insistiendo en que no hay alternativa al diálogo. Mientras tanto, Israel continúa reforzando su postura militar. Según el Atlantic Council, bombarderos estadounidenses B-2 stealth fueron trasladados a la base de Diego García para operaciones potenciales, lo que aumenta las tensiones.
Trump, a pesar de apoyar las negociaciones, no ha descartado una acción militar. Declaró el 11 de abril que Irán podría enfrentar “un bombardeo como nunca antes han visto” si no accede a un acuerdo. Estas declaraciones, junto con los movimientos militares, sustentan las acusaciones de Irán contra Israel de sabotear las conversaciones.
Las partes involucradas continúan preparando el siguiente encuentro técnico en Omán, que se desarrollará en un clima marcado por las amenazas cruzadas y la desconfianza mutua, pero con la mediación activa de actores regionales y europeos en favor del diálogo.