El director del sistema penitenciario iraní reconoció el martes que los vídeos supuestamente obtenidos por un grupo de hackers que muestran abusos en la tristemente célebre prisión de Evin de la república islámica son reales, y dijo que asumía la responsabilidad por los “comportamientos inaceptables”.
Los presuntos hackers afirmaron que la publicación de las imágenes era un esfuerzo por mostrar las sombrías condiciones de la prisión, conocida por albergar a presos políticos y a aquellos con vínculos en el extranjero que a menudo se utilizan como moneda de cambio en las negociaciones con Occidente.
El comentario de Mohammad Mehdi Hajmohammadi se produjo un día después de que The Associated Press publicara partes de los vídeos y un informe sobre los abusos en el centro del norte de Teherán.
Escribiendo en Twitter, Hajmohammadi prometió “evitar que se repitan incidentes tan amargos, así como enfrentarse a los autores”.
“Mis disculpas ante el querido Líder Supremo, a nuestra gran nación y a los nobles funcionarios de las prisiones, cuyos esfuerzos no serán ignorados por las malas acciones” de otros, escribió.
La televisión estatal de Irán también informó de las declaraciones de Hajmohammadi. Una rama de la televisión estatal dijo más tarde que el jefe del poder judicial del país ordenó también una investigación sobre los abusos.
Sin embargo, Hajmohammadi no ofreció ningún plan sobre cómo abordar los abusos en Evin. Desde su construcción en 1971 bajo el mandato del sha de Irán, la prisión ha sido testigo de una serie de abusos que han continuado durante la república islámica.
Después de que Irán reprimiera a los manifestantes tras la controvertida reelección en 2009 del presidente de línea dura Mahmud Ahmadineyad, muchos de los manifestantes detenidos acabaron en Evin. Más tarde, los legisladores impulsaron reformas en Evin, a raíz de las denuncias de abusos en la prisión, lo que llevó a la instalación de las cámaras de circuito cerrado.
En una parte de las imágenes, un hombre rompe un espejo del baño para intentar cortarse el brazo. Los presos -e incluso los guardias- se golpean entre sí en escenas captadas por las cámaras de vigilancia. Presos durmiendo en habitaciones individuales con literas apiladas de tres en tres contra las paredes, envolviéndose en mantas para mantenerse calientes.
Cuatro ex presos de Evin, así como un activista iraní de los derechos humanos en el extranjero, dijeron a la AP que los vídeos se parecen a zonas del centro del norte de Teherán. Algunas de las escenas también coinciden con fotografías de la instalación tomadas anteriormente por periodistas, así como con imágenes de la prisión vistas en fotos de satélite a las que tuvo acceso AP.
Una cuenta en línea que compartió los vídeos con la AP se autodenomina “La justicia de Alí”, en referencia al yerno de Mahoma, venerado por los chiíes. También se burla del líder supremo de Irán, Alí Jamenei. Sin embargo, la cuenta no respondió a las preguntas de la AP sobre sus miembros o sobre cómo realizó el hackeo.