La influencia iraní está detrás de los recientes acontecimientos en Líbano e Irak, advirtió el primer ministro Naftali Bennett al comienzo de la reunión del gabinete del domingo.
Bennett se refirió a los tiroteos de los últimos días en Beirut, en medio de las manifestaciones organizadas por Hezbolá contra la investigación de la devastadora explosión del puerto del año pasado, así como al ascenso del clérigo antiiraní Muqtada al-Sadr en las elecciones de Irak de la semana pasada.
“Estamos siguiendo los acontecimientos en Líbano y un poco al este de allí, en Irak”, dijo Bennett. “En ambos casos, vemos una tendencia que viene de abajo, de fuerzas que simplemente están hartas del control y la influencia de Irán, ya sea Hezbolá en el Líbano o las milicias chiítas en Irak, que se vieron muy afectadas en las elecciones que tuvieron lugar allí la semana pasada”.
Bennett dijo que ambos eran el resultado del “toque iraní”.
“Cada lugar al que van los iraníes entra en una espiral de violencia, pobreza, fracaso e inestabilidad”, dijo el primer ministro.
Bennett expresó su esperanza de que los pueblos libanés e iraquí se liberen del “control asfixiante” del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica y construyan un futuro mejor para ellos.