TEHERÁN – Irán disputó el sábado el número de muertes mencionado en medios extranjeros durante las protestas en el país por los precios del combustible, después de que un grupo de derechos dijo que más de 160 manifestantes fueron asesinados.
Las manifestaciones estallaron a mediados de noviembre, después de que el precio del petróleo en la República Islámica subiera de la noche a la mañana hasta en un 200 por ciento.
Las autoridades iraníes aún no han dicho cuántas personas murieron en los actos de violencia que se produjeron tras el incendio de bancos, surtidores de gasolina y comisarías de policía.
El grupo de derechos humanos con sede en Londres Amnistía Internacional dijo en un tweet el viernes que la represión se cobró la vida de 161 manifestantes.
Pero el viceministro del Interior de Irán, Jamal Orf, cuestionó esas cifras.
“Las estadísticas de las organizaciones internacionales sobre los muertos en los recientes incidentes no son creíbles”, dijo la agencia estatal de noticias IRNA.
Orf acusó a las fuentes que reportaron las cifras de “exagerarlas”.
Añadió que la fiscalía tenía previsto anunciar las cifras basándose en las que recibe de la oficina del juez de instrucción.
Antes de su último tweet, Amnistía Internacional dijo el lunes que 143 manifestantes habían sido asesinados durante la represión, citando lo que llamó “informes creíbles”.
Los gobiernos de Estados Unidos, Francia y Alemania han condenado a Irán por el derramamiento de sangre.
Los disturbios estallaron el 15 de noviembre, horas después de que se anunciara que el precio de la gasolina subiría a 15.000 riales por litro (12 centavos de dólar) de 10.000 para los primeros 60 litros, y a 30.000 riales por cualquier combustible extra comprado después de eso cada mes.
La economía de Irán ha sido golpeada desde el año pasado, cuando el presidente Donald Trump retiró unilateralmente a Estados Unidos de un acuerdo nuclear en 2015 y reimpuso sanciones paralizantes contra la república islámica.
El gobierno de Teherán dijo que las ganancias de la subida del precio del combustible se destinarían a las personas más necesitadas del país.
Según IRNA, los pagos se han realizado desde entonces en tres instalaciones entre el 18 y el 23 de noviembre.
Esta semana un legislador iraní dijo que las autoridades arrestaron a más de 7.000 personas a raíz de las protestas.