La Unión Europea ha emitido una solicitud urgente a Irán para que reevalúe su decisión de retirar la acreditación de varios inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica de las Naciones Unidas.
Esta medida, considerada “desproporcionada y sin precedentes” por la agencia, ha generado graves preocupaciones sobre la capacidad de supervisión nuclear.
Un revés en la supervisión nuclear
La retirada de acreditación afecta a ocho inspectores de nacionalidad francesa y alemana, según informes de medios iraníes y fuentes diplomáticas occidentales. La Unión Europea, que juega un papel crucial como coordinador del acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y las potencias mundiales, expresó su inquietud por la situación.
Un portavoz de la UE señaló que “particularmente preocupante es el impacto directo y severo de esta decisión en la capacidad de la agencia para llevar a cabo sus actividades de verificación, que incluye la supervisión del Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA)”. Además, hizo un llamado a Irán para que reconsidere su decisión sin demora.
Un conflicto con raíces políticas
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán justificó la medida como una respuesta a los “abusos políticos” por parte de Estados Unidos, Francia, Alemania y Gran Bretaña. El acuerdo nuclear de 2015 comprometía a Irán a detener su programa nuclear a cambio de alivio de sanciones económicas. Sin embargo, la reactivación del acuerdo ha sido infructuosa hasta ahora.
La semana pasada, los signatarios europeos del acuerdo, Gran Bretaña, Francia y Alemania, anunciaron que no levantarán las sanciones a Irán el próximo mes, como se había acordado inicialmente.